La cooperativa de electricidad con origen 100% renovable La Corriente ya se ha sacado la licencia como comercializadora de electricidad. Según los datos que proporciona la CNMC, la cooperativa madrileña se lanza al complicado mundo de la comercialización por su cuenta y riesgo.
Hasta ahora, la cooperativa lanzada por varios miembros de la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético, 'comercializaba' electricidad para sus más de 350 socios a través de otra homóloga, la cooperativa vasca Goiener que sí tenía licencia para llevar a cabo las operaciones.
Pero eso ya es historia. Desde el pasado 1 de julio, La Corriente ya forma parte del listado de comercializadoras, y será a la vuelta del verano, "en septiembre u octubre cuando comencemos a operar como tal", asegura a este diario Julio Campos, de La Corriente.
Ahora sus socios ya dependerán solo y únicamente de La Corriente. Se trata de la primera cooperativa de origen 100% renovable de la capital que se lanza a la comercialización y sigue así los pasos de otras compañeras como la ya mencionada Goiener, Som Energia u otras que forman la Unión Renovables.
Pero La Corriente tendrá un sello especial para sus socios y clientes. La posibilidad de utilizar tecnología blockchain para conocer en detalle los consumos, horarios y ver si ese cliente tiene necesidad de instalarse sus propias placas solares, ahorrar energía y convertirse en prosumer.
El mercado de San Fernando, socio de la cooperativa, ha sido la prueba piloto que La Corriente ha puesto en marcha junto a la firma Pylon Network para utilizar esta tecnología blockchain. Allí instalaron el primer analizador Smartmeter en Madrid con el «CORE», una licencia de código abierto (Open-Source), el primer código blockchain completamente operativo desarrollado específicamente para las necesidades del sector energético.
«Desde La Corriente nos sumamos a la vanguardia del sector energético para validar todas las hipótesis que se plantean en este novedoso sistema de intercambios energéticos, ayudando por una parte a reducir el consumo energético de los usuarios y por otra parte optimizar la operatividad de la propia cooperativa y así seguir empoderando comunidades, produciendo, consumiendo y vendiendo energía renovable de forma local y eficiente», señala Julio Campos.
Ahora que el autoconsumo compartido va a ser una realidad en España, La Corriente quiere que sus socios y clientes formen parte de la nueva revolución energética: el uso de tecnología blockchain para poder intercambiar energía con otros socios o usuarios y crear comunidades energéticas en la capital.
El reto está ahí. La tecnología de Pylon Network está. Ahora solo falta que se animen los futuros prosumers.
equipo de luces solares
22/07/2019