El caluroso verano que está azotando a toda Europa está poniendo en evidencia que las energías renovables no son las únicas fuentes de energía a merced de los elementos, siendo numerosos los reactores nucleares, desde Francia a Finlandia, que se han visto bloqueados o su producción restringida debido al calor.
Durante el fin de semana, la energética francesa EDF dijo que se vio obligada a detener temporalmente cuatro reactores nucleares a temperaturas elevadas, incluido un reactor en la planta más antigua del país, Fessenheim, para evitar que se sobrecaliente el agua del río en cuyo margen está asentada. _The Independent _informa que EDF ya había cerrado otras tres centrales eléctricas cerca de los ríos Rin y Ródano por razones similares a principios de la semana pasada.
Las plantas nucleares como estas usan el agua del río para regular la temperatura de sus reactores, descargando agua tibia cuando se devuelve a la vía fluvial. Pero se imponen restricciones al volumen de agua que las plantas pueden usar a medida que aumentan las temperaturas, para proteger los ecosistemas de los ríos.
En Suecia, la eléctrica estatal Vattenfall se vio obligada a cerrar el reactor número 2 de 900MW de su planta nuclear de Ringhals el lunes, cuando la temperatura del agua de mar utilizada para enfriar la planta alcanzó su límite de 25 ° C, amenazando la seguridad y la actividad del reactor.
Otras plantas en la región nórdica, si bien no están completamente cerradas, han tenido que frenar la producción de energía de sus reactores para evitar peores resultados y más peligrosos. Fortum, de Finlandia, redujo la energía en su planta de Loviisa la semana pasada cuando la temperatura del agua alcanzó 32° C, cerca de su umbral de 34° C.
Como explica Reuters, el verano en el norte de Europa ha estado entre 6 y 10° C por encima del promedio estacional hasta ahora y no solo ha causado interrupciones en la energía nuclear, sino que también ha agotado las reservas hidroeléctricas de la región.
Ha sido tan caluroso en Finlandia que una cadena de supermercados invitó a los clientes a pasar la noche en su tienda con aire acondicionado en Helsinki el fin de semana, porque muy pocas casas en el país nórdico tienen aire acondicionado.
Y en Suecia, que también está sufriendo una sequía que provocó docenas de incendios forestales graves en julio, el calor récord ha derretido un glaciar en la montaña Kebnekaise de la nación, por lo que ya no es el punto más alto del país.
De hecho, según investigadores de la Universidad de Oxford y de la red World Attribution, varias ciudades y pueblos de Noruega, Suecia y Finlandia alcanzaron máximos históricos este verano, con ciudades tan al norte como el Ártico registrando temperaturas de casi 32° C.
Y el clima no solo es más caluroso de lo normal, sino también más errático, informa el _New York Times. _"Las lluvias torrenciales y las violentas tormentas eléctricas se han alternado con las sequías en algunas partes de Francia. En los Países Bajos, una sequía, en lugar de los mares crecientes, está perjudicando su sistema de diques porque no hay suficiente agua dulce que contrarreste el agua de mar", dice.
"Los resultados preliminares del estudio de Oxford descubrieron que, en algunos lugares, el cambio climático más que duplicó la probabilidad de la ola de calor europea de este verano".
Daniel Martinez
07/08/2018