La refinería de Galp en Sines recibe tres reactores para la producción de biocombustibles

La refinería de la petrolera portuguesa Galp en la localidad de Sines, a unos 164 kilómetros al sur de Lisboa, ha recibido tres reactores para la producción de biocombustibles avanzados, ha informado la compañía.

Los reactores tienen un peso total de más de 500 toneladas, ya han sido descargados en el puerto de Sines y han sido llevados a la refinería de Galp, donde está previsto que comenzarán a producir combustible sostenible de aviación y biodiésel a partir de 2026, según ha explicado la empresa en un comunicado.

Galp ha indicado que este proyecto de transformación de la refinería es "pionero" en Europa, al tratarse de la primera unidad de producción de biocombustibles avanzados integrada en un sistema de refinado.

Los planes de la petrolera incluyen también una unidad que va a generar hidrógeno verde a escala industrial, que está en construcción en la refinería de Sines.

El consejero delegado de Galp, Filipe Silva, ha afirmado en la nota que "estos proyectos, dos de los mayores de esta naturaleza, representan una inversión global de 650 millones de euros".

Los biocombustibles para Galp

"Esta decisión supone una contribución significativa para la transformación y el crecimiento del sector industrial en Portugal -agregó-, que sitúa a Galp a la vanguardia del desarrollo de soluciones con bajas emisiones de carbono, esenciales para la transición energética".

La unidad de hidrógeno verde, con una inversión de 250 millones de euros, tendrá una capacidad de electrólisis de 100 MW y producirá hasta 15.000 toneladas de hidrógeno renovable al año.

Respecto a la unidad de biocombustibles avanzados, donde estarán los reactores, tendrá una inversión de 400 millones de euros, en asociación con la japonesa Mitsui, y una capacidad de producción de 270.000 toneladas anuales

Según Galp, este proyecto supondrá la creación de 76 puestos de trabajo permanentes durante la fase de operación, además de dar empleo a unos 750 trabajadores, de media, durante la fase de construcción, y a 1.150 "en su momento álgido".