Las energéticas alemanas, austríacas y suizas pierden la esperanza de utilizar hidrógeno en sus redes de gas

La mayoría de las empresas energéticas de Alemania, Austria y Suiza planean reducir las inversiones en sus redes de gas, ya que casi todas han perdido la esperanza de utilizarlas para transportar hidrógeno en un futuro climáticamente neutro, según una encuesta de la consultora empresarial Horvath citada por la revista de noticias Der Spiegel.

“La opinión de que las redes de gas ya no desempeñarán un papel fundamental en el futuro es cada vez más generalizada”, afirmó la consultora en un informe al que tuvo acceso la revista. “El estancamiento y el declive prevalecen en el sector del gas”.

A medida que Alemania se acerca a su objetivo de cero emisiones netas de 2045, el gas fósil deberá eliminarse progresivamente en gran medida. En teoría, la red de gas alemana podría reutilizarse para transportar combustibles neutros para el clima, como el biogás o el llamado hidrógeno verde, producido con fuentes de energía renovables. Sin embargo, se prevé que estos combustibles alternativos resulten prohibitivamente caros e ineficientes para la calefacción de edificios. Los expertos estiman que más del 90% de las redes de distribución de gas del país quedarán inutilizables.

Menos inversión en la red de gas

Horvath encuestó a 91 empresas de servicios públicos en países de habla alemana, y el 65% de ellas afirmó querer recortar las inversiones en la red de gas en los próximos años. El 61% afirmó que esperaba reducir significativamente o incluso desmantelar sus redes de gas para 2040. Solo el 4% de los encuestados aún ve potencial para la conversión completa de los gasoductos al hidrógeno, la mitad de la proporción del año pasado en la encuesta anual. En cambio, dos tercios de los encuestados planean al menos duplicar su gasto en almacenamiento de electricidad.

Hace menos de tres años, durante la controversia nacional alemana sobre la transición a una calefacción climáticamente neutra, muchas empresas aún advertían contra la posibilidad de descartar el futuro de los gasoductos, ya que esperaban utilizarlos para el hidrógeno verde en un futuro climáticamente neutro. Las redes de gas alemanas tienen casi 600.000 kilómetros de longitud y han proporcionado a los operadores fuentes de ingresos fiables.

Alemania está preparando normas que permitirán a las eléctricas locales eliminar gradualmente las redes de gas mientras planifican un futuro climáticamente neutro, permitiéndoles cortar el suministro a los consumidores sin su consentimiento si se les avisa con años de antelación.

Mejor invertir en almacenamiento

En cambio, dos tercios de las empresas planean al menos duplicar el gasto en almacenamiento en baterías. La asociación de empresas de servicios públicos VKU afirmó que los proveedores deberían poder notificar a los clientes las desconexiones planificadas de la red de gas con cinco años de antelación, en lugar del plazo mínimo de preaviso de diez años previsto actualmente.

Una encuesta reciente de la asociación sectorial VKU reveló que el 46 % de las empresas municipales de servicios públicos y los proveedores locales de energía desconocían el futuro de su red de gas.

La asociación encuestó a más de 600 empresas, y una quinta parte afirmó que desmantelaría completamente sus redes de gas y cambiaría a calefacción urbana y bombas de calor. Casi una de cada cuatro empresas municipales de servicios públicos tiene previsto combinar el desmantelamiento con la conversión a gases verdes como el hidrógeno o el biometano.