Las soluciones de energía renovable pueden ser la columna vertebral de los esfuerzos de descarbonización urbana, según un nuevo informe de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) y la Iniciativa Climática Internacional (IKI) sobre El auge de las energías renovables en las ciudades: soluciones energéticas para el futuro urbano.
Las ciudades son responsables de más del 70% de las emisiones totales de CO2 relacionadas con la energía y, por tanto, son cada vez más relevantes para abordar el cambio climático, construyendo una infraestructura urbana resiliente al clima con energía renovable. Hogar del 55% de la población mundial en la actualidad, las ciudades son también los motores económicos del planeta y representan el 80% del PIB mundial. Según las estimaciones de la ONU, las ciudades tendrán que albergar a dos tercios de la población mundial en un entorno habitable y con bajas emisiones de carbono para 2050.
La integración de las energías renovables en los sistemas energéticos locales se ha convertido en parte de la acción transformadora en muchas ciudades del mundo. Aun así, todo su potencial permanece sin explotar. Si bien unas 671 ciudades han establecido un objetivo renovable y más de la mitad de ellas apuntan al 100% de energías renovables, la mayoría de las ciudades con objetivos se encuentran en Europa y América del Norte.
Sin embargo, se espera que 2.500 millones de personas más se conviertan en habitantes urbanos en las próximas tres décadas, el 90% de ellos en Asia y África. Sin embargo, las ciudades de estas regiones se están quedando atrás en el establecimiento de objetivos renovables, según muestra el nuevo informe, más aún porque se espera que crezca su demanda de energía.
Además, la mayoría de las ciudades grandes y megaciudades que han establecido objetivos de energía renovable han perseguido solo una pequeña parte de las energías renovables en su mix energético. Solo la megaciudad de Los Ángeles con 10 millones de habitantes tiene un objetivo de 100% renovable establecido para 2045.
Otras megaciudades muestran niveles mucho más bajos de ambición, con todos menos São Paolo y Shenzhen apuntando a participaciones renovables por debajo del 30%. Solo 4 ciudades en el rango de población de 5 a 10 millones (Atlanta, Barcelona, Madrid y Toronto) y 33 ciudades en el rango de población de 1 a 5 millones tenían objetivos para el 100% de energías renovables.
La energía hidroeléctrica, la bioenergía y la conversión de residuos en energía ya desempeñan un papel importante en las estrategias de descarbonización urbana. Y el uso de energía solar y geotérmica en las ciudades está aumentando, mientras que la capacidad de aprovechar la energía eólica dentro de las ciudades avanza, pero sigue siendo marginal. En vista de la creciente demanda de refrigeración en África y Asia, la energía solar térmica en particular tiene el potencial de extenderse gradualmente al sector del frío, triplicándose de 2.000 a 6.000 teravatios hora para 2050.
El nuevo informe destaca la importancia de la planificación urbana y el desarrollo de redes "inteligentes" a través de la innovación y la adopción de tecnologías habilitadoras como vehículos eléctricos, sistemas de almacenamiento de energía y sistemas de gestión de energía inteligente para facilitar la integración de las energías renovables. Esto también significa acoplar los sectores de energía, edificios, transporte, calefacción e industria para lograr una mayor eficiencia del sistema y mejorar la resiliencia climática.
Andres
05/11/2020