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Navantia entrega a Iberdrola los anclajes para el parque eólico marino Wikinger

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Navantia Fene ha realizado hoy el acto de entrega de las estructuras de anclaje (jackets) para el parque eólico marino Wikinger, ubicado en Alemania.

En el acto, desarrollado en astillero de Fene (A Coruña), han participado los máximos responsables de las dos empresas, José Manuel Revuelta e Ignacio Sánchez Galán, respectivamente, además del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.

De momento han partido hacia el parque situado en el mar Báltico cinco de las 29 estructuras que fabricará Navantia Fene y que anclarán al fondo marino otros tantos aerogeneradores de un total de 70 que componen el proyecto Wikinger.

A lo largo de las próximas semanas el resto de estructuras seguirán viajando desde el astillero de Fene (A Coruña) hasta la ciudad alemana a lo largo de las próximas semanas.

A principios de este mes partió un buque con la primera de las estructuras y en el día de ayer zarpó el segundo, que se encuentra ahora en aguas comunitarias con cuatro estructuras a bordo y que está previsto que, sin realizar paradas, alcance Alemania en unos diez días.

En estos momentos restan seis de las 29 piezas por fabricar, las cuales se culminarán, según las previsiones, este mes de agosto, con la intención de que en septiembre rematen todos los envíos y el aspecto del puente de As Pías, en la ría de Ferrol, recupere su habitual, modificado por las gigantes estructuras amarillas en los últimos meses.

El contrato, firmado en diciembre de 2014, comprende la fabricación de 29 de los 70 anclajes que conforman el parque eólico alemán, además de la subestación eléctrica y su conexionado en aguas del mar Báltico, que están encargados a los astilleros que Navantia tiene en Puerto Real (Cádiz).

La construcción está siendo desarrollada por la alianza formada por Navantia y la asturiana Windar, que ya han finalizado 23 estructuras, cada una de ellas de unos 60 metros de altura, gracias al trabajo de unos 700 empleados directos y 400 de las auxiliares.

En total, en el astillero de Fene se han acumulado 650.000 horas de trabajo con un presupuesto de 90 millones de euros.

El presidente de Navantia, José Manuel Revuelta, ha reseñado que la entrega se ha realizado "en el plazo, precio y calidad requeridos cuando se firmó el contrato", de forma que se ha culminado "con éxito" y ha supuesto "un gran reto" para la compañía que dirige

"Navantia ha cumplido", ha remarcado, para después dirigirse a los operarios y decirles que son "la demostración de que Navantia se está transformando y puede ser competitiva", gracias a "haber vuelto al mercado civil para quedarse".

Revuelta ha concluido que la compañía atraviesa "un buen momento" y que las expectativas de futuro "son aun mayores", además de apuntar que "la eólica marina es clave".

Sánchez Galán, por su parte, ha calificado los anclajes de "proyecto emblemático" porque en el mismo confluyen los "principales ejes" de la estrategia de su firma: "la apuesta por las energías renovables y la innovación tecnológica, la internacionalización, la contribución al desarrollo económico y la creación de empleo"

En los discursos de Feijóo y Revuelta ha habido numerosos guiños hacia el presidente de Iberdrola, empresa a la cual ambos aguardan que Galicia siga unida para futuras inversiones.

Núñez Feijóo ha agradecido el "trabajo" a las "cabezas" y a las "manos" que han construido estos anclajes que, según ha destacado, implicaron ámbitos como la construcción civil, la calderería, la pintura o la logística.

"Este trabajo es el del resurgir de estas instalaciones después de 13 años", ha apuntado el titular de la Xunta, además de detallar que dicho resurgir es producto de "momentos de dificultad" y de la "vocación de recuperación de la plantilla", gracias a la cual "se han conseguido nuevos pedidos".

Como en anteriores visitas a las instalaciones, Feijóo ha apuntado que el naval es "un ámbito estratégico para la economía gallega", algo que se hace "más evidente" en la comarca de Ferrolterra, pero que se ha sustentado gracias a la "capacidad técnica" de los astilleros.

"Resulta esperanzador que después de este pedido haya más pedidos. Ya no estamos en aquellos años angustiosos en los que había un pedido cada año, pero nada nuevo en el horizonte cuando se terminaban", ha subrayado, aunque ha apelado a "no conformarse" en este contexto.

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