En su discurso sobre el estado de la Unión de septiembre de 2023, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, destacó los retos a los que se enfrenta actualmente el sector eólico europeo. Se comprometió a garantizar que el futuro de la energía eólica fuera "made in Europe" y prometió un nuevo paquete de medidas de apoyo al sector eólico. La Comisión ha presentado hoy su Paquete Eólico.
En él se describen una serie de medidas que pueden adoptarse rápidamente para reforzar el sector eólico europeo. Algunas de las medidas son para la UE, otras para los Estados miembros y otras para el sector. En conjunto, estas medidas cambiarán las reglas del juego de la industria eólica europea y la capacidad de Europa para cumplir sus objetivos climáticos y energéticos.
La Comisión Europea ha presentado hoy su "Paquete Eólico", cuyo objetivo es acelerar el desarrollo de la energía eólica en Europa y reforzar la competitividad de la industria eólica europea.
Las metas del paquete eólico
La estrategia energética europea REPowerEU quiere contar con 420 GW de energía eólica de aquí a 2030, frente a los 205 GW actuales. Para conseguirlo, Europa necesita reforzar y ampliar su cadena de suministro de energía eólica.
La cadena de suministro de energía eólica tiene dificultades en estos momentos. Los costes de los insumos han subido mucho en los dos últimos años. Los persistentes cuellos de botella en la concesión de permisos no han ayudado. Y el mal diseño de las subastas en muchos países ha mermado los ingresos tanto de los promotores de parques eólicos como de los fabricantes de turbinas. Los fabricantes y sus proveedores necesitan aumentar la producción y construir nuevas fábricas. Pero para ello necesitan apoyo financiero y de otras políticas.
Al mismo tiempo, los fabricantes chinos de aerogeneradores empiezan a ganar pedidos en Europa. Ofrecen turbinas más baratas y condiciones de "pago aplazado", injustamente subvencionadas por el Estado chino.
Medidas para reforzar la industria eólica europea
El Paquete Eólico propone un Plan de Acción Eólico que establece 15 acciones para reforzar la industria eólica europea.
El diseño de las subastas es un punto clave. La Comisión propone una serie de criterios de precalificación para los proyectos. Estos criterios decidirán si un proyecto puede participar en una subasta de energía eólica. Abarcan la seguridad de los datos y la ciberseguridad, la protección del medio ambiente y la capacidad de suministro.
La Comisión también subraya la importancia crítica de que los Estados miembros indexen sus precios y tarifas de subasta. Una indexación inadecuada es un gran problema en estos momentos. Los promotores de parques eólicos ganan una subasta con un precio determinado y, un año después, cuando van a encargar sus turbinas, los costes han subido y el precio de la subasta no funciona".
A continuación, el Plan de Acción establece una serie de medidas para ayudar a financiar las inversiones en nuevas fábricas, infraestructuras y mano de obra eólica. Propone duplicar el dinero disponible para la fabricación limpia en la próxima convocatoria del Fondo de Innovación de la UE, hasta 1.400 millones de euros.
El Banco Europeo de Inversiones (BEI) también desempeñará un papel clave. Proporcionará herramientas de reducción del riesgo y contragarantías antes de finales de 2023 para cubrir la exposición de los bancos privados cuando presten dinero a la industria eólica. El BEI también ha cambiado su política de préstamos para financiar la industria manufacturera, además de su amplia financiación de parques eólicos.
El Plan de Acción también aboga por mejorar la visibilidad del despliegue de la energía eólica. Los planes nacionales de subastas se publicarán ahora en una plataforma digital de la UE. Y como parte de sus Planes Nacionales de Energía y Clima revisados para 2030, los Estados miembros de la UE tendrán que esbozar planes a diez años para el despliegue de la energía eólica, incluida una perspectiva para 2040.
La Comisión también hará pleno uso de los instrumentos comerciales a su disposición para garantizar la igualdad de condiciones con los competidores no europeos injustamente subvencionados. La Comisión vigilará de cerca posibles prácticas comerciales desleales, como la subvención de productos relacionados con la energía eólica importados en la UE, y está dispuesta a activar los instrumentos políticos pertinentes, por ejemplo el Reglamento de la UE sobre subvenciones exteriores.
El Plan de Acción también pretende acelerar la autorización de nuevos parques eólicos. A finales de 2023, la Comisión pondrá en marcha una herramienta específica para ayudar a los Estados miembros a digitalizar sus procesos de concesión de permisos. El sector eólico europeo ya está desarrollando una herramienta digital en línea para la concesión de permisos que está siendo probada por las autoridades locales de Dinamarca y Polonia. Gracias a ella, el personal encargado de los permisos puede tramitar tres veces más proyectos que antes. Y mejora el intercambio de información y la rendición de cuentas con las comunidades locales y los promotores.
¿Y ahora qué? El Paquete Eólico establece medidas para la Comisión Europea, el BEI, los Estados miembros y el sector eólico. Todos tendrán que desempeñar su papel. Y las medidas deben tomarse cuanto antes. No hay que esperar a la nueva legislación de la UE. La Comisión propone consagrar el apoyo al Paquete en una Carta de la Energía Eólica específica que se firmará a finales de año.
Giles Dickson, Consejero Delegado de WindEurope, afirma: "El Paquete Eólico cambia las reglas del juego del sector eólico europeo. Las nuevas medidas en materia de financiación, subastas y permisos acelerarán el desarrollo de los parques eólicos. Y, lo que es más importante, ayudarán a la cadena europea de suministro de energía eólica a suministrar los equipos necesarios. Esto es bueno para el empleo y el crecimiento, y para la seguridad energética de Europa. Como dijo Ursula von der Leyen en su reciente discurso sobre el Estado de la Unión, el futuro de la tecnología limpia europea debe hacerse en Europa".
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