¿Qué supone el cambio de Jaguar del que tanto se está hablando?

Tras anunciar que dejaría de vender modelos de combustión en Reino Unido y mostrar las primeras imágenes de los test del modelo que iniciará su nueva era, Jaguar está totalmente en el candelero a causa de su cambio de rumbo. Por si acaso no estás al tanto de lo que ha pasado, la firma inglesa ha decidido eliminar toda su gama de productos actual y centrarse en la total electrificación, la misma que estará presente de 2025 a final de esta década con tres nuevos modelos y cuya primera versión conceptual se presentará el próximo 2 de diciembre.

Sin embargo, la polarización ha empezado tras su última campaña en redes sociales en la que la histórica marca fundada en 1922 bajo el nombre de Swallow Sidecar Company y renombrada a con el apelativo del felino tras las II Guerra Mundial por la semejanza de sus iniciales en sus coches con las SS alemanas, confirma que ha dado un giro de 180º a su concepción. He de reconocer que he escuchado más voces críticas que favorables pero, ¿es de verdad para tanto?

Cambio de rumbo

Esta última presentación ha generado polémica tanto por la elección del multicolor, dejando de lado el British Green y el tartán por una explosión de tonos pastel como, inexplicablemente por la diversidad racial. Sea como fuere, lo que es una realidad es que el este pequeño spot tiene más semejanza con un anuncio de moda o perfumes que con uno de coches (de hecho no se deja entrever ni una sola silueta del automóvil).

Luego está el tema del logotipo, que ha suprimido también al felino y ha cambiado la tipografía de sus letras combinando la única mayúscula de la G con el resto de minúsculas del nombre (aunque desde Jaguar dicen que la J y la U también son capitulares). El director creativo de la marca, Gerry McGovern ha reconocido que si bien la nueva dirección fue diseñada para despertar las emociones, no todos la aceptarán. Es probable que los clientes más antiguos y tradicionales de Jaguar no se sientan impresionados por la pomposidad o que incluso los actuales propietarios de los XE y E-Pace se den cuenta de que necesitarán multiplicar por 30 sus emolumentos para poder permitirse el nuevo sedán que llegará en 2025 y que probablemente cueste más de 100.000 euros.

Firma de ultra lujo eléctrica

Porque esa es otra de las críticas suscitadas por los detractores que verán cómo Jaguar dejará de ser una firma Premium para ser una marca de ultra lujo. De hecho el objetivo es pasar de rivalizar con los Audi, BMW o Mercedes-Benz para poner su foco en los Bentley, Aston Martin o, por qué no, Rolls-Royce. Todo ello bajo sistemas de propulsión 100% eléctricos que siguen sin ser del agrado de muchos, más cuando uno piensa en la herencia histórica y de motores que lleva adherida a la marca desde hace más de medio siglo.

El próximo 2 de diciembre saldremos de dudas definitivamente pero la primera imagen del prototipo ya ha sido filtrada por la propia marca en la que se percibe una silueta robusta y muy semejante en forma a los Rolls, destacando tanto la ausencia de ventanilla trasera (al estilo de los Polestar 4) como de una rejilla posterior que, igualmente, ha levantado críticas y burlas por ser comparada con un extractor de aire de los edificios.

Todavía es pronto para juzgar cualquier tipo de cambio pero lo que es evidente es que el objetivo principal de ‘Jag’ no era solo comunicar que se avecinaban grandes cambios, sino que la gente hablase de ello y eso lo han conseguido al 100%. Aunque la marca esté recibiendo críticas en las redes sociales, la campaña está funcionando en cierto sentido pero lo que de verdad importa no es la tipografía del nuevo logotipo ni el diseño de los modelos, sino el aspecto del nuevo sedán eléctrico que veremos en poco más de una semana.