Petróleo & Gas

Repsol quiere prepararse para afrontar la transición energética y luchar contra el cambio climático

Ningún comentario

Repsol quiere que se le deje de ver como una compañía petrolera tradicional, prefiere que se la identifique como una compañía energética. Su plan estratégico, del que se conocerá una actualización a principios de junio, incluye planes para trabajar por la transición energética, ya que la compañía es consciente de que es el momento de apostar hacia esta dirección.

En la Junta de Accionistas de pasado 11 de mayo, el presidente Antonio Brufau dedicó una parte importante de su discurso para hablar sobre el cambio climático: "En Repsol apostamos por una transición energética hacia un futuro de bajas emisiones, en el que ninguna fuente de energía es a priori descartable. Todas tienen su contexto, su rol y su lugar en el crecimiento económico global".

"No tenemos ninguna duda de que estamos totalmente comprometidos con la lucha contra el cambio climático", dijo, "la eólica y la solar ya son muy competitivas" y en el futuro los automóviles eléctricos también se convertirán en una parte importante de los negocios de Repsol.

Días después, Bloomberg publicaba un artículo en el que aseguraba que Repsol ya no iba a continuar creciendo en el negocio del petróleo y del gas para prepararse en su transición hacia las energías limpias. También decía que la actualización de su plan de negocio desvelará la estrategia de la compañía, que es limitar la producción del petróleo y el gas a los niveles actuales y no conservar más de ocho años las reservas de hidrocarburos. Según la prestigiosa agencia, esta información se la facilitó una persona que les pidió no ser identificado porque la información no era pública .

"Hay un malentendido, Repsol trabaja en el sector de la energía dedicado a los hidrocarburos y lo seguirá haciendo" explican fuentes cercanas a la compañía, "Bloomberg confunde todas las acciones que esa compañía ha emprendido en favor de una economía más sostenible con la decisión de dejar el negocio de los hidrocarburos".

La venta de su participación en Gas Natural Fenosa no ha ayudado mucho. La operación milmillonaria, de 3.816 millones de euros, ya tiene destino. En la Junta de Accionistas se anunció que un tercio se asignaría al crecimiento orgánico, especialmente a hidrocarburos, otro tercio a la mejora tecnológica del sector químico (downstream), y la última partida se destinará a activos que le ayuden a poner su grano de arena en la lucha contra el cambio climático.

"El mundo sigue necesitando gas y petróleo", llegó a decir su presidente, pese a las informaciones publicadas.

Desembarcar en el negocio renovable

En los últimos meses hemos sido testigos de varios intentos fallidos de llegar a un acuerdo entre la energética y proyectos renovables ya en operación. Por ejemplo en noviembre pasado se hizo publico que había contratado a la compañía Alantra para que le buscara oportunidades de compra dentro del segmento renovable. Poco después se conocía que estaba estudiando posibles opciones en el mercado de compañías 'verdes' como X-Elio o Renovalia.

"En realidad es al revés, hay muchas empresas que ofrecen proyectos renovables a Repsol y más en cuanto se anunció la venta de GNF" añaden las mismas fuentes, "sin embargo no ha hecho nada, no ha comprado nada, aunque eso no quiere decir que no lo vaya a hacer en el futuro".

Mientras se decide por entrar de lleno en el mercado de las renovables, Repsol lleva ya más de una década apostando por la sostenibilidad. Desde 2009, participa en Ibil, una compañía compartida con el Ente Vasco de Energía al 50%, dedicada a los puntos de recarga de coches eléctricos, que ha instalado ya 859 puntos siendo la compañía que más instalaciones ha realizado en España, tanto en el ámbito público como en el privado.

También investiga para la industria eólica marina. Principle Power fue la primera empresa del mundo capaz de diseñar, instalar y operar una turbina flotante semisumergible para la generación eólica marina, para aquellas zonas del planeta donde la plataforma continental esté muy profunda. Sigue estando en una fase experimental pero el primer prototipo a escala real, el WindFloat, utiliza una turbina Vestas de 2MW y ha producido ya casi 17 GWh desde su puesta en marcha a finales de 2011.

La economía circular es otra de sus grandes apuestas. El próximo martes, 22 de mayo, presentará en el Salón del Automóvil, WiBLE, la nueva compañía de 'carsharing' conjuntamente con Kia que operará en Madrid y que contará con una flota de 500 unidades del híbrido enchufable Niro. Y mientas se espera a que el coche eléctrico pueda hacer grandes desplazamientos sin sufrir la conocida 'ansiedad por la autonomía', despliega su potencial en el segmento del combustible GLP, menos contaminante que el petróleo.

Por último, entre los proyectos que desarrolla para luchar por reducir las emisiones de CO2, las últimas investigaciones están dirigidas a reutilizar sus emisiones contaminantes en la producción de plásticos polímeros más sostenibles.

Noticias relacionadas

No hay comentarios

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios