La primera central nuclear flotante del mundo, Academik Lomonósov, ha emprendido su primer viaje para contribuir con el desarrollo energético en el norte de Rusia y el Lejano Oriente, según informó la empresa estatal rusa Rosatom, encargada de la construcción de la plataforma nuclear.
El Académik Lomonósov salió de San Petersburgo, en donde fue construida, en dirección a Múrmansk, en el noroeste de Rusia, para cargar combustible nuclear y encender sus reactores. La central flotante deberá navegar por el Mar Báltico alrededor del extremo norte de Noruega hasta Murmansk, en donde se alimentarán sus reactores nucleares y, en su camino, pasará, además, por numerosas ciudades costeras escandinavas de Finlandia, Suecia y Dinamarca.
El barco, que fue bautizado en homenaje al célebre científico ruso del siglo XVIII, Mijaíl Lomonósov, cuenta con dos reactores KLT-40S de 35 megavatios cada uno, que tienen capacidad suficiente para suministrar energía eléctrica a una ciudad de unos 100.000 habitantes y 50 Gcal / h de energía térmica durante su funcionamiento normal.
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