Sonatrach encuentra en la italiana ENI a su nuevo socio estratégico en lugar de Naturgy

El presidente de la compañía argelina de hidrocarburos Sonatrach, Toufik Hakar, se reunió este domingo en Argel con su colega del grupo italiano Eni, Claudio Descalzi, para abordar el suministro de gas al país europeo y las formas de fortalecer la asociación entre las dos empresas.

El anuncio de la visita del presidente del grupo italiano se produjo el viernes pasado pocas horas después de que Hakar explicara que su país, uno de los principales proveedores de gas para España, no descarta revisar los precios del gas a su "cliente español", Naturgy, mientras que mantendrá la misma tarifa para el resto de países.

En un comunicado enviado a la prensa, la empresa nacional argelina señaló que Hakar y Descalzi trataron el abastecimiento de gas en medio de la crisis en Ucrania y revisaron "las iniciativas a corto y medio plazo susceptibles, para aumentar el suministro" de Italia a través del gasoducto TransMed/Enrico Mattei que atraviesa el territorio tunecino.

Hakar recordó "las relaciones históricas que vinculan a las dos empresas" y también de "la estrategia común de la asociación destinada a acelerar el desarrollo de los proyectos de Berkine Sur mientras continúa el esfuerzo por invertir en energía nueva y renovable".

El encuentro fue una oportunidad para confirmar "la voluntad de acelerar el desarrollo de nuevos proyectos de petróleo y gas en la región de Berkine Sur en virtud del contrato que entró en vigor el 6 de marzo último" situado en la región central de Uargla, donde Eni trabaja junto al grupo Sonatrach desde 2013 y cubre un área total de 7.880 kilómetros cuadrados en la parte sur de Berkine.

La misma fuente indicó que este proyecto incluye la construcción en modalidad Fast Track de un nuevo centro de desarrollo de petróleo y gas en la región, basándose en la sinergias con los activos MLE-CAFC existentes en el alcance 405b.

La advertencia el pasado viernes de Argelia de revisar los precios de España llegó días después de que Madrid anunciara un cambio de posición sobre el futuro político del Sáhara Occidental, que tiene a Argelia como principal aliado.