Tesla trabaja actualmente en el desarrollo de un cargador con forma de "serpiente metálica" -tal y como lo ha descrito el propio presidente del fabricante de coches eléctricos, Elon Musk- que se moverá por sí solo para conectarse al automóvil sin necesidad de acción humana alguna.
De esta forma, el conector se desprendería automáticamente de la estación o el poste de recarga hasta conectarse en el puerto del Tesla Model S, tal y como ha prometido Musk a través de su cuenta en Twitter.
De momento, se desconoce si el ingenio está pensado para las estaciones de recarga de la red de la marca o también para los postes privados, aunque Musk sí declaró después que será compatible con los Model S actuales y no sólo con los que se fabriquen en el futuro.
Tesla continúa así su trabajo sobre la idea de crear un coche totalmente autónomo en el que no sea precisa la acción de un conductor. Ni siquiera para la recarga, si se acaba materializando esta "serpiente metálica" inteligente.
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