4 consejos para controlar la factura de la luz de una segunda residencia

Empiezan las vacaciones y muchas personas se trasladan a la casa de la playa o del pueblo para descansar del ajetreo de la ciudad. Pero contar con una segunda residencia supone pagar una factura de luz adicional. ¿Cómo se puede ahorrar dinero en la factura durante los meses en los que la vivienda de veraneo no está habitada? Según Lucera, la compañía eléctrica que apuesta por la eficiencia real con energía 100% verde, ajustar la potencia y buscar un precio por kilovatio barato es clave para que no se dispare el recibo.

Algunos usuarios piensan en la posibilidad de dar de baja la luz, pero es una opción poco recomendable, sólo es rentable para las viviendas que no se vayan a habitar en el medio-largo plazo o que se encuentren a la venta. Si la vivienda se suele utilizar en algunas ocasiones, no es recomendable la interrupción del abastecimiento, ya que obliga a los usuarios a pagar un coste por dar de alta el servicio.

Para poder ahorrar en la factura de la luz de la segunda residencia sin necesidad de dar de baja el servicio, Lucera señala las siguientes claves:

1. **Ajustar la potencia contratada: **La potencia contratada indica el número de electrodomésticos y otros aparatos que es posible utilizar a la vez. Muchos usuarios suelen ajustar la potencia de su segunda residencia al mínimo y deciden organizarse entre los miembros de la familia para consumir de la manera más eficiente posible, intentando por ejemplo evitar utilizar la vitrocerámica a la vez que la lavadora está en funcionamiento. También es necesario tener en cuenta no pasarse en la bajada de potencia, ya que volver a subirla puede suponer un coste alto (en torno a 60€ por cada tramo de potencia que se suba).

2. **Tener en cuenta el precio de la luz: **Una de las modalidades de tarificación más justa y que más nos puede permitir ahorrar es el pago de la energía por horas. El precio de la luz varía todo el tiempo dependiendo de la hora del día. Ese valor se establece en el denominado ‘pool’ eléctrico, que determina el precio en función de la oferta y la demanda, como en una especie de subasta. La mala noticia es que este tipo de facturación solo es posible si los usuarios disponen de un contador inteligente integrado en la red. Lucera permite a sus clientes pagar la luz a precio de coste a pesar de que no tengan este contador inteligente integrado, a través de una curva estándar media del precio de la luz cada mes.

3. **Contratar la tarifa adecuada: **El ritmo de consumo en los apartamentos de veraneo es distinto. No tenemos las mismas rutinas durante el año que en las vacaciones. Por eso, es probable que no sea necesario tener la misma tarifa en la segunda residencia que en el domicilio habitual. Para saberlo, es necesario analizar el consumo y en base a él, escoger la tarifa más adecuada, considerando si es conveniente por ejemplo contratar la discriminación horaria, tarifa con la que, sin hacer grandes cambios en la rutina, los usuarios podrían ahorrar en gran medida en su factura de luz, simplemente planificando el uso de los electrodomésticos en horas Valle. Gracias a la calculadora de ahorro de Lucera, que analiza usando tecnologías de Big Data el uso que hacemos de la energía, es posible saber cuál es la mejor configuración para nuestro contrato eléctrico, permitiendo así gastar menos a final de mes.

4. **Eliminar servicios adicionales: **Algunas compañías eléctricas ofrecen varios servicios adicionales que aumentan el coste de la factura, pero muchas veces varios de estos servicios no son realmente útiles para el usuario, sobre todo en las segundas residencias. Por eso es muy recomendable revisar cuáles son los servicios extra contratados y plantearse si esos agregados son útiles, ya que se podría ahorrar al eliminarlos.

“Tener una segunda vivienda genera un gasto adicional cada mes en la factura eléctrica, aunque no la estemos utilizando. Simplemente teniendo en cuenta cómo es nuestro consumo y cuántas veces solemos visitarla, podremos analizar cuál es la mejor configuración para el contrato, ajustando potencia y tarifas a nuestras necesidades reales y evitando pagar de más”, señala Emilio Bravo, CEO de Lucera