Abengoa ha aclarado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que el plan para reducir su participación en la sociedad Abengoa Yield por debajo del 50% estará concluido "con una alta probabilidad" en un plazo inferior a un año.
La compañía realiza estas consideraciones en respuesta a un requerimiento del supervisor del mercado acerca de las cuentas anuales del pasado ejercicio. Aparte del control de Abengoa Yield, la empresa ofrece información sobre otras cuestiones, entre ellas la forma de contabilizar la sociedad conjunta con EIG.
Al describir la situación de Abengoa Yield, la empresa dirigida por Santiago Seage explica que desde diciembre de 2014 trabaja en esta desinversión como parte de las iniciativas para optimizar su estructura financiera.
El plan no solo tiene como objetivo vender por etapas diversas participaciones, sino también "perder el control sobre la sociedad", para lo que se acometerá además un cambio en la estructura de gobierno corporativo de la participada.
En concreto, Abengoa reforzará el papel de los consejeros independientes y limitará el ejercicio de su poder en la junta de accionistas. Esta estrategia y la intención de completarla durante este ejercicio justifica que Abengoa Yield haya sido clasificada como activo no corriente disponible para la venta.
La compañía también explica que las inversiones conjuntas con EIG en la nueva sociedad conjunta, por valor de 2.500 millones de dólares (2.300 millones de euros), incluyen no solo las partidas asociadas a los activos que se transferirán a la 'joint venture', sino también el valor estimado de las futuras inversiones.
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