Abengoa deja tirada a Iberdrola en su proyecto estrella de Brasil

El grupo de ingeniería y renovables Abengoa está buscando por "una solución de mercado" para los proyectos cuya construcción y operación le fueron adjudicados en Brasil, dijo a la agencia Reuters. Este parón se ha convertido en una fatalidad para la eléctrica Iberdrola, una de las propietarias del megaproyecto hidroeléctrico de Belo Monte.

A principios de diciembre, la compañía dijo al regulador eléctrico brasileño Aneel que iba a parar las obras de sus proyectos brasileños y que negociaba su venta o la entrada de socios.

"En Brasil, Abengoa está en permanente contacto con las autoridades locales para encontrar una solución a los proyectos de nuestra compañía que están en desarrollo en el país", dijo la empresa.

El parón de las obras previsiblemente retrasará la construcción de los 1.700 kilómetros de líneas de transmisión eléctrica necesarios para conectar el nuevo proyecto hidroeléctrico de Belo Monte con puntos clave de la red nacional.

En consecuencia, Belo Monte no podrá generar la electricidad prevista, dijo Aneel recientemente, por lo que repercutirá en los intereses de Iberdrola como socia de la central.

El gobierno de Brasil cuenta con Belo Monte –cuya capacidad de 11.200 megavatios la convertirá en la tercera planta hidroeléctrica del mundo- para impulsar el suministro eléctrico del país en cerca del 10%. La potencia media de la presa se calcula en 4.500 megavatios.

Esta nueva capacidad es necesaria para suavizar la presión de la creciente demanda eléctrica durante una sequía que redujo bruscamente la producción hidroeléctrica de las presas fuera de la cuenca del Amazonas en las regiones del noreste y el sureste del país.

Casi dos tercios de la electricidad que obtiene Brasil es de origen hidroeléctrico, pero los nuevos proyectos se están retrasando.

Miles de despidos

La práctica totalidad de los empleados de Abengoa en Brasil serán despedidos. De los más de 5.000 trabajadores se quedará solo con unos 400. La compañía ya ha despedido a más de 2.000 y en las próximas semanas seguirá el goteo continuo de despidos, según cuenta la prensa brasileña.