El Gobierno alemán ha aprobado una moratoria que prohíbe la técnica del 'fracking' para extraer gas de esquisto, después de años de controversia acerca de los riesgos medioambientales que conlleva este tipo de extracción. Sin embargo, grupos ecologistas han denunciado que esta ley no es suficiente y han prometido que recurrirán la medida.
De acuerdo con la legislación aprobada, se seguirán pudiendo hacer perforaciones de prueba, pero solo con el consentimiento del Estado. El 'fracking' o técnica de extracción hidráulica es un método que se utiliza para extraer gases naturales o petróleo del subsuelo. La extracción de los gases se realiza mediante la expulsión de varios productos tóxicos en la zona subterránea donde se encuentre el gas, que provocan una ruptura controlada en la roca y permiten que el recurso natural deseado salga.
A pesar de que la técnica no es nueva y que sus partidarios alegan que no es más contaminante que ninguna otra utilizada por la industria, muchos grupos ecologistas han expresado su rechazo frente a este método de extracción, ya que puede contaminar los acuíferos y provocar la contaminación de las reservas de agua potable del país.
Los dos principales partidos que conforman la coalición liderada por la canciller alemana, Angela Merkel, la Unión Cristiano Demócrata (CDU) y el Partido Social Demócrata (SDP), ya intentaron llegar a un acuerdo para conformar una regulación sobre este sistema de extracción, pero no se llegó a presentar ningún tipo de reforma al respecto, debido a los grandes desacuerdos que existían sobre el tema entre ambos partidos.
Este martes, sin embargo, tanto el CDU como el SPD han llegado a un acuerdo para aprobar una moratoria de duración indefinida sobre el 'fracking'. La ley alemana, sin embargo, requiere que el Parlamento alemán vuelva a reconsiderar la medida en 2012, y decida si sigue siendo válida.
No obstante, la organización ecologista de Amigos de la Tierra en Alemania (BUND), ha criticado la moratoria, ya que según declaran, al establecer una fecha de revisión de la prohibición, el parlamento básicamente ha acordado volver a permitir el 'fracking' dentro de cinco años.
"La moratoria de la coalición en contra del 'fracking' pone los pelos de punta. Esta legislación tiene que ser detenida y remplazada por una ley que prohíba de verdad y para siempre la fractura hidráulica", ha declarado Humbert Weiger, director del BUND.
La industria alemana tiene cierto interés en no cerrarle la puerta al 'fracking' de forma definitiva, ya que alega que es una técnica de extracción de gas muy económica que puede ayudar a ahorrar en términos de gasto energético.
El 'fracking' ha sido prohibido en Francia, debido a los riesgos medioambientales que presenta, mientras que en Reino Unido, tras una moratoria de 18 meses, se ha vuelto a permitir la facturación hidráulica bajo un estricto marco de contención de riesgo medioambiental.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios