Tras el paso de la borrasca Bernard, la red eléctrica andaluza ha sufrido daños significativos. Como una de las principales compañías eléctricas en España, Endesa tiene la responsabilidad de garantizar un suministro eléctrico constante y seguro para millones de hogares y empresas en Andalucía y es por eso por lo que ha puesto en marcha su Plan Operativo de Emergencia tras el paso del temporal.
La borrasca Bernard, que dejó a su paso vientos superiores a los 145 kilómetros por hora, provocó daños en la infraestructura eléctrica en algunas áreas de Andalucía. Ante esta situación, Endesa desplegó rápidamente equipos de reparación para restaurar el servicio eléctrico en las áreas afectadas. Sin embargo, este evento climatológico ha tenido una especial incidencia en la red aérea de alta y media tensión de Endesa en las provincias de Huelva y Sevilla, hasta donde la compañía ha tenido que trasladar personal de provincias como Córdoba, Málaga y Cádiz para dar soporte a los técnicos de la zona.
"La tormenta fue bastante impredecible, ningún modelo meteorológico anticipaba que pudiera tener los efectos que ha tenido. A pesar de que nosotros estábamos preparados y en prealerta, Bernard superó con creces todas las expectativas que teníamos y tuvimos que elevar de manera muy inmediata nuestro grado de emergencia y poner a nuestros técnicos y todos nuestros recursos en la calle" declara Emilio Jiménez, responsable de las redes de distribución de Endesa en Andalucía.
Actuación
El Plan Operativo de Emergencia de la compañía se divide en dos fases: la primera, que es la de emergencia, donde lo fundamental es tratar de reponer en el menor tiempo posible el suministro a todos los clientes, justo después del paso de la tormenta —por la seguridad de las personas y la afectación de la línea— mediante el centro de control, acotando al máximo aquellos tramos que tienen avería y por tanto, reduciendo el número de clientes que están afectados por la interrupción de suministro, y la segunda, donde la Brigada de campo se centra en hacer las reparaciones —que en algunos casos son provisionales— para dar suministro de la manera más rápida posible.
En total, un equipo humano de más de 150 personas está trabajando de forma continuada desde el pasado domingo, cuando llegó la tormenta. Todos ellos en coordinación con el Centro de Control de la Red, con refuerzos de hasta 25 técnicos especialistas.
Ahora mismo, han sido revisados 6.300 kilómetros de líneas en la zona afectada y se han detectado "216 torres de media y alta tensión que están o rotas o caídas o deformadas" tal y como indican desde la compañía. "A parte de los medios terrestres, hemos usado también un helicóptero que por vía aérea nos permitió establecer de una manera muy precisa cuáles eran los daños y el alcance de los mismos" añaden.
Desde la eléctrica señalan también que la reparación de los destrozos causados por el temporal llevará meses y será millonaria, pero que todavía no hay una cifra concreta que cuantifique los daños sufridos en la red.
Futuro
Visto que el clima ya no es como era antes, esto cambia o anima a cambiar de alguna manera la proyección de los futuros apoyos de las futuras torres eléctricas, diseñadas para aguantar las entonces condiciones climatológicas adversas, como vientos de 120 kilómetros por hora.
"Esto tiene que hacer que vayamos adaptando tanto nuestros procedimientos como nuestras instalaciones para poder estar lo más preparados posible. Habrá que analizar si la capacidad de aguante de un apoyo es algo que viene definido por reglamento por ley" indica Emilio Jiménez.
"Habrá que estar muy atentos en los próximos años para ver si esto es un evento excepcional o si se trata de algo que ha llegado para quedarse" añade el responsable de redes.
Respuesta
La preparación anticipada, la comunicación efectiva y la rápida respuesta son elementos esenciales para mantener la electricidad fluyendo y garantizar la seguridad y comodidad de los ciudadanos. Desde el comienzo del temporal, Endesa ha mantenido un contacto fluido con las autoridades locales, provinciales y regionales competentes, así como con el Emergencias 112 Andalucía y Protección Civil, para coordinar los trabajos de recuperación.
Y aunque siempre habrá desafíos en la gestión de eventos climáticos extremos, Endesa ha demostrado su compromiso con la comunidad andaluza al trabajar incansablemente para restaurar el servicio eléctrico. La evaluación constante y la adaptación a nuevas circunstancias son clave para seguir mejorando y brindar un servicio de calidad en el futuro.
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