Movilidad

BMW usará aluminio con un bajo impacto en carbono

Lo hará a partir de 2024 gracias al acuerdo firmado con la minera británica Rio Tinto que produce aluminio en Canadá con un 70% menos de CO2

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BMW sigue adelante con su objetivo de ser un fabricante CO2 neutral lo antes posible. Además de ser una de las pocas marcas que ya está trabajando en el desarrollo de baterías de estado sólido, la firma bávara ha establecido diferentes planes para reducir la huella de carbono de sus plantas de producción. Desde la cadena de suministro, hasta el uso de la economía circular en la producción de baterías e incluso en la propia imprimación de sus pinturas.

Pues bien, ahora acaba de firmar un acuerdo con la multinacional minera británica Rio Tinto para la compra de aluminio, material que posteriormente será integrado en la producción de los coches de la planta de Spartanburg (Carolina del Sur, Estados Unidos),. El acuerdo comenzará a ser efectivo a partir del 2024 y gracias al proceso de producción de dicho material por parte de Rio Tinto en sus instalaciones de Canadá, el ahorro en emisiones será de un 70% en comparación a la producción de aluminio de manera convencional.

Proceso innovador

El secreto de dicho ahorro no es otro que la tecnología ELYSIS, desarrollada para la producción de aluminio y que está revolucionando el proceso de fundición necesario para la fabricación. Este innovador método utiliza ánodos sin carbono para eliminar todas las emisiones de CO2 relacionadas con el proceso. El Grupo BMW tiene la intención de convertirse en uno de los primeros clientes en utilizar esta tecnología en la producción estándar de sus modelos X, entre los que se encuentran los X3, X4, X5, X6 y X7.

Además del proceso sin emisiones de carbono, el acuerdo también incluye las aleaciones de aluminio producidas utilizando electricidad procedente de fuentes de energía renovables, con unas emisiones de CO2 que sólo representan un tercio de la media del sector. Las instalaciones de producción de aluminio de Quebec funcionan casi íntegramente con electricidad procedente de seis centrales hidroeléctricas locales. Como contribución adicional a la conservación de los recursos, el contenido reciclado se mezclará con el producto final para alcanzar potencialmente hasta un 50% de material secundario. El uso de la tecnología blockchain de Rio Tinto también garantiza la trazabilidad completa del aluminio, hasta la mina de bauxita original. Esto permite la transparencia de extremo a extremo a lo largo de la cadena de suministro y, por tanto, desempeña un papel importante en el seguimiento del cumplimiento de las normas medioambientales y sociales para la extracción de materias primas.

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