Hay diferentes tipos de tarifas eléctricas, tan diferentes entre sí como los propios usuarios, aunque éstos no siempre tienen claro qué tipo de tarifa pagan y aún menos cómo afecta a su factura.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) explica cuales son las tarifas de la luz a las que cada hogar español puede optar.
En las tarifas con Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC), o precio variable, la cuantía de los pagos es imprevisible, ya que se deciden cada hora y cada día, así que pueden tener 24 precios diferentes al día. Antes, al PVPC se le conocía como Tarifa de Último Recurso (TUR), y sólo si la compañía es una de éstas puedes tener una tarifa de este tipo: Gas Natural S.U.R. SDG, EDP Comercializadora de Último Recurso S.L, E.ON Comercializadora de Último Recurso S.L., Endesa Energía XXI S.L.U. e Iberdrola Comercialización de Último Recurso S.A.U. En ella están más de 14 millones de españoles.
Por su parte, las tarifas con precio estable pero regulable son las más ofrecidas por las compañías actualmente. El contrato incluye cláusulas que permiten su revisión automática, generalmente a fecha de 1 de enero, aunque hay compañías, como EDP, que lo hacen cada tres meses.
Tarifas con precio fijo
Otra opción son las tarifas con precio fijo, similares a las de precio estable pero regulable pero con compromiso de mantenerla durante un tiempo determinado, generalmente un año. La factura eléctrica, en este caso, varía en función del consumo, pero el precio del kWh es siempre el mismo. La tarifa ganadora de la II Compra Colectiva de Energía de la OCU, que ha ganado Gas Natural Fenosa, es de este tipo, con un precio fijo durante todo un año.
A día de hoy, las tarifas de precio fijo son las más caras del mercado, tal y como contó este diario la semana pasada, siendo una oferta de Iberdrola la más cara de todas.
No existen tarifas planas de la luz
Existen también las mal llamadas tarifas planas, con las que el usuario se compromete a pagar un importe fijo mensual que se mantiene incluso aunque no se haga uso de la electricidad. Pero en ningún caso se puede realizar un consumo ilimitado, por lo que no es una tarifa plana como las que se utilizan con internet. Es un bono anual de kWh con el que si se sobrepasa el consumo acordado se deberá abonar el adicional. Ojo, porque el riesgo de pagar más de la cuenta es muy alto, asegura la OCU.
En cuanto a las denominadas cuotas fijas, no existen al 100%. No son tarifas, sino formas de pago. Al margen de la tarifa, cliente y compañía acuerdan un importe mensual o bimestral fijo durante once meses, y el mes doce se recalcula la diferencia entre lo pagado y lo que el usuario debería haber desembolsado si se le hubieran cobrado lo realmente consumido. Es un método sencillo para dar estabilidad a la factura, pero se debe comprobar bien el consumo real.
Al margen de todas estas modalidades de pago, se deben tener siempre en cuenta los peajes del Gobierno. Si éste modificara la tarifa, la compañía revisaría el precio a pagar, independientemente del tipo de modalidad de pago que se tenga.
Alfonso
10/11/2014