easyJet ha asegurado que los vuelos comerciales con aviones impulsados por motores eléctricos o híbridos, capaces de cubrir rutas de menos de 500 kilómetros, podrían ser una realidad a partir de 2027.
"Significaría que una ruta como la que une Ámsterdam y Londres podría ser la primera eléctrica", ha afirmado el consejero delegado de easyJet, Johan Lundgren, en una entrevista.
La aerolínea de bajo coste británica anunció en septiembre del pasado año su alianza con Wright Electric para desarrollar, construir y operar un avión comercial de pasajeros totalmente eléctrico en su red de vuelos.
Wright Electric ha patentado además un motor que puede operar con aviones de pasajeros de mayor tamaño para "la transición hacia una aeronave comercial". Tras el desarrollo de una versión de 50 plazas, trabaja en un avión propulsado con motores eléctricos de 150 o 180 asientos, que pudiera estar listo antes de 2030.
El prototipo de avión eléctrico, que su socio desarrolla con una autonomía de 542 kilómetros, está diseñado específicamente para vuelos de corta distancia, de modo que se adapta a la red de rutas de easyJet, donde el promedio de vuelo es de menos de dos horas y muchas conexiones de ciudades clave como de Londres a Ámsterdam, de Londres a París o de Belfast a Londres se podrían enlazar con un avión eléctrico.
Esta iniciativa forma parte de la estrategia de la aerolínea para reducir las emisiones de carbono y el nivel del ruido en el campo de la aviación con el objetivo de reducir las emisiones de carbono a 72 gramos en 2022, lo que representaría una reducción del 10% con respecto al nivel actual y una mejora del 38% desde el año 2000.
La aerolínea también está desarrollando un concepto de avión híbrido que usaría una celda de combustible de hidrógeno guardada en la bodega del avión. Este innovador sistema de emisiones cero permite capturar la energía mientras el avión frena al aterrizar y utilizarla para cargar las baterías ligeras del sistema cuando el avión está en el suelo. La energía recogida puede ser reutilizada por el avión sin necesidad de utilizar sus motores a reacción.
Además, la aerolínea también cuenta con aviones A320neo y 321neo que suponen hasta un 15% de ahorro en consumo de combustible y emisiones de CO2 y una reducción de la huella de ruido del 50% en despegue y aterrizaje, lo cual supone un gran beneficio para las comunidades alrededor de los aeropuertos.
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