La Torre Eiffel tiene 324 metros de altura y el Empire State de Nueva York, 380 metros. Muy pronto, las turbinas eólicas podrían estar compitiendo con esas alturas, a juzgar por los acontecimientos recientes. Hace unos meses hablábamos de que gracias a las nuevas técnicas y a los nuevos materiales de construcción, las torres de los aerogeneradores que se proyectan en la actualidad van a alcanzar en breve los 170 metros de altura, lo que unido a la extensión de las palas eólicas nos encontraríamos con estructuras con una envergadura muy próxima a la de la Torre Eiffel.
Quienes predecían esta nueva tendencia eólica eran los ingenieros de la danesa K2 Management. Su director general, Henrik Stamer, predijo que “las torres de 170 metros podrían convertirse en algo común en un futuro próximo en mercados como EEUU y Alemania, como parte de un nuevo horizonte renovable. Esperamos ver más de estos megadiseños en la medida que ayudemos a nuestros clientes a obtener el máximo provecho de sus proyectos eólicos”.
Poco más de tres meses después, Jürgen Quentin, de la alemana FA-Wind, la agencia alemana para la promoción de la eólica terrestre, dice que la turbina eólica que actualmente están levantando en el condado de Rhein-Hunsrück será la más grande del mundo cuando esté terminada dentro de unos meses. La altura del buje es de 165 metros. Si a eso se añade los 65 metros de las palas, la punta de la pala superior alcanza los 230 metros de altitud.
La compañía Nordex ya ha obtenido los permisos para dos turbinas adicionales para esta zona y tiene otras 35 están en cartera. La información está disponible en alemán en la reciente presentación del sector eólico alemán en el primer trimestre de 2016.
La turbina es del modelo Nordex N131 para viento suave. La que se puede ver en la web de la compañía es de 3 MW, pero la que la que está siendo construida en este momento tiene una potencia de 3,3 MW, como la que ilustra esta información, según recoge el portal energético Renewables International.
La unidad es un ejemplo de lo que Bernard Chabot llama a la revolución del viento silencioso: torres más altas y palas del rotor más largas en relación con el tamaño del generador. De hecho, el aerogenerador de 3,3 MW es sólo ligeramente más potente que el promedio de los generadores instalados actualmente en Alemania y ni siquiera la mitad del generador más potente disponible.
Las torres más altas ponen las palas del rotor en un área de menor turbulencia, en la que la velocidad del viento es más estable, de manera que las palas más largas incrementan el área de barrido y, por tanto, la energía producida por el generador. Las estimaciones realizadas sobre el rendimiento anual de las turbinas aumentaría en casi un 30% debido a la menor resistencia aerodinámica superficial y a la viscosidad del aire. Por lo tanto, **si la turbina se sube desde 70 metros a 170 metros, la producción de energía eólica se incrementará una media del 35%. **
Piloto.
04/07/2016