El Ayuntamiento de Zaragoza, ahora en manos de los comunes, quiere formar parte del mercado eléctrico y ha decidido que la figura para empezar sea la del consumidor directo.
El año pasado sacó a concurso la representación para la compra de electricidad en el mercado energético español, pero casi nadie le quiso acompañar.
Solo una empresa se presentó al concurso. ¿Qué raro no? Obtener un suculento contrato con uno de los grandes ayuntamientos del país parece ser suficiente como para presentarse, pero claro la letra pequeña del pliego de condiciones les echó para atrás a las empresas que se dedican a representar en el mercado eléctrico.
La trampa no era otra que el ahorro pretendido por el Ayuntamiento de Zaragoza no iba a ser tanto ya que exigía que todo su consumo fuera con certificación de origen renovable. En total, hay que conseguir 120 GWh de origen renovable exportables en el mercado, un hecho que es prácticamente imposible, según cuentan varias fuentes a este diario.
Obtener tanta electricidad con certificación de origen renovable no es fácil. Según los datos de la CNMC, solo está al alcance de unas pocas compañías, en su mayorías grandes eléctricas y comercializadoras, pero que un consumidor directo tiene muy complicado conseguirlo.
El consumidor directo es una figura del mercado que se crea principalmente para ahorrarse gasto energético. Su participación en el mercado es directa sin contar con intermediadores, por tanto te quitas costes de la comercializadora como el Fondo Nacional de Eficiencia Energética, etc.
Si a ello le sumas la exigencia de comprar electricidad 100% renovable con garantías de origen por 120 GWh, parte de ese ahorro se esfuma. Esta electricidad con origen renovable es más cara que las demás. Los certificados ya comienzan a tener un precio y por 120 GWh merma bastante ese ahorro.
Este gran reto lo va a tener que hacer la única empresa que se presentó, Urbener, que ha ganado el contrato valorado en 250.000 euros. Esta empresa especializada en representación del mercado también es maña y va a tener que obrar el milagro si no quiere tener problemas con el consistorio.
Ahora comenzará las pruebas a través de compra virtual de energía para comprobar si todo funciona para lanzarse a ser consumidor directo el próximo otoño.
Lo raro es que a la vuelta de la esquina hay elecciones locales y si los zaragozanos quieren cambiar podría complicar este contrato.
Se calcula que, mediante la compra directa el Consistorio ahorrará 1,5 millones de euros anuales a comercializadora y, a cambio, el Consistorio sólo necesita la agencia intermediaria que es el contrato que se ha adjudicado por valor de 250.000 euros (IVA no incluido).
El consejero de Urbanismo y Sostenibilidad, Pablo Muñoz, ha señalado que el Ayuntamiento gana autonomía frente a intermediarios y grandes compañías eléctricas: "Evitamos tener que contratar una empresa comercializadora, con lo que nos ahorramos el sobrecoste causado por los beneficios de esa empresa, que habitualmente son las grandes eléctricas".
El siguiente paso será que el Ayuntamiento pueda crear su propia comercializadora, lo que permitirá entre otras cosas poder actuar directamente frente a situaciones de pobreza energética. Un hecho que resulta muy caro para los consumidores como ha quedado demostrado con la comercializadora pública de Barcelona, Barcelona Energía, que tiene precios mucho más caros que lo que ofrece el mercado en tarifa regulada o PVPC.
Parece que no aprenden los ayuntamientos del cambio. Todos se creen que el mercado eléctrico es jauja y cuando se encuentran luego con la realidad no saben cómo esconderlo. Una nueva aventura en el mercado eléctrico. Suerte.
SUSANA
09/05/2019