Fue una de las promesas del Gobierno, sacar a concurso la capacidad en la red eléctrica que dejarían las centrales térmicas de carbón cuando cerrasen y desmantelen dichas plantas. El Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico ya tiene cómo va a ser el modus operandi de estos nuevos concursos y está a punto de sacar a información pública el primero de estos procesos que será el de la central térmica de Andorra (Teruel), propiedad de Endesa.
Fuentes ministeriales han asegurado que primero se sacará a información pública los términos de la convocatoria para después en sí lanzar la convocatoria por obtener los más de 1.100 MW que ocupan en la red los generadores de la central de Andorra.
Según ha podido saber El Periódico de la Energía, el concurso por este nodo será especial y es el primero de estas características que se realiza a nivel mundial. En la convocatoria se tendrán en cuenta distintos baremos, desde la creación de empleo, su impacto ambiental, la formación de trabajadores, el alto valor tecnológico y su impacto en innovación, en definitiva, todo lo que conlleva hacer una transición justa en la zona.
Es por ello que para resultar ganador de este nodo de Andorra habrá que presentar modelos que integren todo esto. A día de hoy, solo ha salido a la luz el Plan Futur-e de Endesa en el que pretende desarrollar gran cantidad de renovables, almacenamiento con baterías y una planta de hidrógeno verde.
El pasado mes de febrero, Endesa comenzó las obras de desmantelamiento de la central que durarán durante varios años.
El plan para Andorra cuenta con una inversión de más de 1.487 millones de euros y tiene como objetivo final la construcción de 1.725 MW de potencia renovable, de los cuales 1.585 MW corresponderán a la que será la mayor planta solar en construcción en Europa y 139 MW tendrán origen eólico. El proyecto contará además con un sistema de almacenamiento energético a gran escala de hasta 159,3 MW.
Este plan está planteado en tres fases:
- La primera se realizará de forma simultánea a los trabajos de desmantelamiento. Se trata de un **parque solar fotovoltaico de 50 megavatios (MW) **de potencia, que se construirá en la parcela de la central térmica y un parque eólico de 49,4 MW que se instalará en el término municipal de Ejulve (Teruel).
- La segunda fase, que prevé impulsar 235 MW de energía solar fotovoltaica y 54,3 MW de almacenamiento en baterías también se instalará en gran medida dentro del perímetro de la actual central térmica. Se desarrollará a lo largo de 15 meses, entre marzo de 2022 y junio de 2023, y coincidirá con los trabajos de desmantelamiento.
- En la tercera y última fase, que se iniciaría en mayo de 2023 y finalizaría a principios de 2026, se construirían 1.300 MW de potencia fotovoltaica, 90 MW de energía eólica y 105 MW de almacenamiento en baterías. La potencia asociada a estas fases se construiría en terrenos de los términos municipales de Andorra, Alcorisa, Alcañiz, Calanda e Híjar.
Eendesa ya posee puntos de conexión para las dos primeras fases, pero la tercera que es la más importante depende de la asignación por parte del Ministerio para la Transición Ecológica de la capacidad de evacuación de la central térmica de Andorra. Por tanto, Endesa será uno de los grandes actores para el concurso.¡
Además de este plan, Endesa tiene en mente sacar adelante una planta de hidrógeno verde. El proyecto renovable para Andorra se completaría con una inversión de 294 millones de euros en la instalación de un electrolizador de 60 MW que fabrique hidrógeno renovable, un proyecto incluido dentro de las 23 iniciativas que han presentado al Ministerio de Transición Ecológica para el desarrollo de esta tecnología en España. Parte de la potencia renovable que se pondrá en marcha en Teruel se podría dedicar a la producción de hidrógeno, lo que supondría la creación de 144 puestos de trabajo en la fase de construcción del electrolizador y 65 estables en la de operación y mantenimiento.
Fuentes ministeriales aseguran a este diario que hay más interés real por obtener esta capacidad y que se presentarán más proyectos interesantes para la zona.
Tras el proceso de Andorra le seguirán el resto de centrales térmicas que ya han cerrado y que iniciarán pronto las obras de desmantelamiento. En total, se trata de más de 5 GW que ya se han desconectado y que podrían aumentar según vayan cerrando otras centrales en los próximos años.
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