El grupo nuclear francés Areva anunció este jueves la venta de sus actividades de construcción y mantenimiento de reactores atómicos a la eléctrica EDF, dentro del plan diseñado por el Gobierno para evitar su quiebra.
Según el protocolo de acuerdo firmado entre ambas compañías, EDF se compromete a adquirir el 75% de Areva NP, la filial dedicada a los reactores nucleares, por un precio de unos 2.000 millones de euros.
Los dos grupos acordaron "la creación de una entidad conjunta de concepción, gestión de proyectos y comercialización de los reactores nuevos", señaló el conglomerado nuclear.
El grupo nuclear, que aseguró que tiene unas necesidades de financiación de 7.000 millones de euros, procederá a una ampliación de capital "significativa".
Areva seguirá controlando las actividades de producción de combustible nuclear y de tratamiento del mismo, mientras que EDF se compromete a adquirir este combustible a su nuevo socio.
La operación deberá concluirse a lo largo del año próximo y puede comportar la reducción de la plantilla de Areva.
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