El Partido Socialista no admitirá ni apoyará ninguna de las propuestas de Unidas Podemos en materia de política energética que han salido a la luz en los últimos días. La posible animadversión entre los miembros del Gobierno por las últimas medidas adoptadas que afectan a la factura de la luz será cortada de raíz tal y como ya succedió el pasado mes de enero cuando subió el precio del mercado mayorista durante la toormenta Filomena.
En ese momento, Unidas Podemos propuso la creación de una empresa pública, a través de una nacionalización, para atajar el problema. Algo que no gustó en las filas socialistas. Lo explicó la propia vicepresidenta cuarta del Gobierno, Teresa Ribera, en una entrevista con El Periódico de la Energía. "Nosotros desde el primer momento lo que dijimos es que esto no nos parece eficaz (...) Nosotros creemos simplemente que no es la mejor manera ni la más eficiente de poder abordar la reforma energética".
Ahora, con las nuevas tarifas de la luz en vigor desde el pasado 1 de junio y con los altos precios de la electricidad en los mercados mayoristas europeos, Unidas Podemos aprovecha otra vez para atacar a su propio socio de Gobierno con críticas y mensajes a medios de comunicación de que las cosas no se han hecho bien. Unidas Podemos ha aprovechado otra vez esta situación para lanzar por enésima vez que quiere crear una empresa pública de electricidad. Lo anunció el portavoz del grupo en el Congreso, Pablo Echenique, y días después ha sido la ministra Ione Belarra quien ha insistido con eso.
Fuentes socialistas aseguran a este diario que por ahí no van a pasar y "se les volverá a explicar la situación y por qué no es una medida eficaz".
A ello hay que sumar la nueva propuesta, que por ejemplo anunció en Twitter el ministro de Consumo, Alberto Garzón, que quieren ahora cambiar los horarios del precio valle aumentando dos horas, desde las 22 horas hasta las 08.00 horas del día siguiente, en vez del horario de 00.00 a 08.00 que rigen las nuevas tarifas. Un horario que ha sido creado por la CNMC a la hora de establecer los nuevos peajes.
https://twitter.com/agarzon/status/1402701185333800968?s=20
Desde la filas del PSOE no dan crédito a esta propuesta y más cuando se trata de una medida conocida por todos, incluidos miembros del Gobierno de Unidas Podemos, desde hace meses.
Con tan solo 10 días de aplicación de las nuevas tarifas "no se puede pretender ahora cambiarlas", además "esa decisión es potestad de la CNMC", cuya Circular de peajes eléctricos estuvo en periodo de alegaciones durante semanas.
Este diario se ha puesto en contacto con el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico y le ha preguntado al respecto de ello. Fuentes ministeriales aseguran a El Periódico de la Energía que "somos respetuosos con la competencia de la CNMC".
Estas mismas fuentes han recordado que desde el Gobierno se le ha solicitado a la dirección del regulador "que sigan de cerca y evalúen el impacto del cambio de tarifa en consumidores domésticos, industriales y, sobre todo pymes; que valoren si hay consumos cautivos y eventuales efectos regresivos y que se mantengan vigilantes por si pudiera haber comportamientos contrarios al buen funcionamiento del mercado".
"Creemos que hay que estar muy atentos y velar por el buen funcionamiento de algo que, en sus modelizaciones, daba buen resultado pero que es novedoso y que inicia su funcionamiento en un momento de precios de la luz altos", explican las fuentes.
Cabe recordar otras palabras de la vicepresidenta Ribera en la entrevista concedida a este diario: "No se trata de mantenernos sin ningún tipo de movimiento que afecte a los actores tradicionales, creo que los actores tradicionales tienen que evolucionar y la regulación es importante para hacerlos evolucionar, pero tampoco se trata de que vamos a hacer la transformación energética por oposición a los actores tradicionales. Lo que debemos hacer, como responsables institucionales, es que el conjunto del sistema vaya cambiando en la dirección correcta".
Lo único en lo que parecen estar de acuerdo entre los miembros del Gobierno es la medida adoptada para acabar con los beneficios sobrevenidos a centrales nucleares, hidroeléctricas y algunos parques eólicos gracias al aumento del precio del CO2. Esta medida sí es del gusto de Unidas Podemos. Al igual que sucede con la creación del Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico (FNSSE) con la que pretende el Gobierno sacar las primas de la factura de la luz y repartir su coste (6.500 millones anuales) entre el resto de suministros energéticos (gas y gasolina) durante los próximos cinco años. Con ambas medidas, el Gobierno pretende reducir la factura de la luz en un 15%.
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