El Vaticano estudia la instalación de sistemas solares en los colegios católicos de todo el mundo

La implantación de docenas de instalaciones solares en las escuelas católicas de la diócesis de Townsville, en Queensland (Australia) ha impresionado tanto a los responsables de estas cuestiones en el Vaticano, que ahora piensan que el experimento se podría replicar en todo el mundo y, al tiempo que se consiguen importantes ahorros de energía, se demostraría el compromiso de la Iglesia católica con el medio ambiente, recogido en la encíclica del papa Francisco Laudato Si.

Las 31 escuelas en la diócesis de Townsville han cambiado recientemente a la energía solar, lo que se ha traducido en un ahorro anual en la factura eléctrica de 250.000 dólares australianos (casi 170.000 euros).

La colaboración entre las escuelas católicas de Queensland y el Vaticano se vio facilitada por el ex viceprimer ministro y ex embajador de Australia ante la Santa Sede, Tim Fischer. En su papel de patrono de Eco Community, la empresa que diseñó el proyecto Townsville, Fischer se reunió en Roma con el cardenal George Pell, el encargado de supervisar las finanzas de la Santa Sede, según cuenta la publicación australiana The Catholic Leader.

En  un encuentro de alto nivel celebrado en el vaticano, Fischer contó que el director de Eco Community, Martin Oldfield, y la directora ejecutiva de la Townsville Catholic Education, Cathy Day, hicieron una demostración en tiempo real a los funcionarios del Vaticano con un ordenador portátil, de la producción y el consumo de energía solar de una de las escuelas. Fischer comentó que “poder observar  en tiempo real el consumo de energía de una escuela católica en Charters Towers, mientras uno está sentado en una sala de juntas en Roma, resultó impresionante”.

Un hombre de negocios educado por los jesuitas, Martin Oldfield, creó Eco Community con su hermano, Justin. Martin explicó que "el aspecto más agradable del proyecto Townsville era la reducción de la huella de carbono." Y añadió: "Es la encíclica Laudato Si en acción".

El ahorro que supondría extender la energía solar a todas las escuelas del mundo sería impresionante. Sólo en Australia, según indica Oldfield, "el ahorro sería de 1.400 millones de dólares en los próximos 25 años. Su aplicación supondría un alivio importante para los presupuestos de las escuelas católicas, no solo en Australia, sino en toda la OCDE".

En cuanto a los futuros objetivos de la implantación de la energía solar en escuelas católicas, Oldfield  comentó que “estoy mirando en Italia, Francia, Argentina y Chile, y partes de Estados Unidos, posiblemente, California".

El potencial solar sin explotar de las escuelas de Estados Unidos es enorme. Según la Asociación de Industrias de Energía Solar (SEIA), si cada una de las más de 72.000 escuelas para las que la implantación de una sistema solar de tamaño medio sería una inversión rentable, la capacidad total de energía fotovoltaica instalada llegaría a 5,4 GW, una cantidad equivalente a más de un tercio de toda la capacidad de la energía solar fotovoltaica instalada actualmente en los Estados Unidos.