Un equipo de investigadores alemanes ha desarrollado dos dispositivos que caben cómodamente en la suela de un zapato ordinario y que permiten aprovechar la energía que los seres humanos generamos al caminar. Los resultados se publican en la revista
Uno de los dispositivos recoge la energía cuando el tacón golpea el suelo y el otro la del pie que oscila. Ambos han sido diseñados para formar parte de la futura generación de electrónica usable y sus creadores esperan que pueda poner fin a la constante sustitución y eliminación de baterías, que no sólo son costosas sino potencialmente perjudiciales para el medio ambiente.
Además, el dispositivo que recoge la oscilación del pie también permite que el zapato se ate y desate de forma automática, lo que puede ser de gran utilidad para los ancianos y personas con sus capacidades físicas mermadas. “El zapato detectaría cuándo un usuario se lo pone y se ataría a sí mismo, de la misma forma que se abriría cuando es requerido”, explica Klevis Ylli, del Instituto Hahn-Schickard-Gesellschaft para Micromaquinado y Tecnología de la Información.
Ambos dispositivos generan energía mediante la explotación del movimiento entre los imanes y bobinas. Cuando el campo magnético de un imán en movimiento pasa por una bobina estacionaria, se induce una tensión y se genera una corriente eléctrica.
El dispositivo de oscilación es de 41 mm de ancho y 70 mm de largo y puede generar una potencia media de 0,84 mW. El de choque es de 40 mm x 60 mm, y ha sido capaz de generar un máximo de 4,13 mW de potencia cuando un sujeto de prueba se movía a 5 km por hora en tierra firme.
Ambos dispositivos fueron utilizaros para dar energía a un sensor de temperatura en el zapato. Generaron suficiente energía como para alimentar las lecturas de temperatura que se transmitían de forma inalámbrica a través de 10 m a un dispositivo portátil. Pudieron enviar hasta siete transmisiones para cada paso dado.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios