Fortescue Future Industries (FFI) iniciará este año la producción de electrolizadores de hidrógeno de fabricación australiana en su nueva fábrica de Gladstone (Queensland), tras la fabricación de su primer prototipo interno.
El director ejecutivo de FFI, Mark Hutchinson, afirma que las instalaciones se construyeron a tiempo y por debajo del presupuesto, y que ahora está estudiando la posibilidad de utilizar su propia tecnología PEM (membrana electrolítica de polímero) de fabricación australiana, tras el fracaso de un acuerdo con la empresa estadounidense Plug Power el año pasado.
Hutchinson reiteró que FFI tiene al menos cinco grandes proyectos de hidrógeno en todo el mundo que podrían alcanzar decisiones de inversión financiera (FID) a finales de 2023. Entre ellos se encuentran dos en EE.UU. (Arkansas y Texas), destinados a suministrar hidrógeno verde para el transporte pesado; uno en Kenia, para producir amoníaco verde destinado a la producción local de fertilizantes; otro en Brasil, para exportar amoníaco verde; y otro en Noruega, para exportar amoníaco verde a Europa.
También hay una propuesta para convertir una planta de amoníaco alimentada por gas en Gibson Island, cerca de Brisbane, en una planta de amoníaco verde alimentada por energías renovables, probablemente también para exportar a Asia.
Incentivos
Hutchinson reiteró su petición de que el Gobierno australiano dé un paso adelante y trate de igualar al menos algunos de los incentivos y mecanismos de apoyo presentados por el Gobierno estadounidense en su Ley de Reducción de la Inflación, y que están siendo igualados por la UE y otros gobiernos.
"Como empresa, realmente tenemos que centrar nuestra atención en ambos mercados y aprovechar al máximo los lugares comerciales donde la energía renovable está disponible y es asequible", afirmó Hutchinson.
En cuanto a la tecnología de electrolizadores propia de FFI, Hutchinson no reveló mucho, aparte de decir que había sido desarrollada internamente y que sería una pieza clave de las instalaciones de Gladstone. "La tecnología existe desde hace mucho tiempo, pero nunca se había hecho a gran escala. Así que, como industria, tenemos mucho que aprender en los próximos años a medida que vayamos aumentando la escala y la tecnología, creo, se desarrollará muy, muy rápido en los próximos años. Así que vamos a formar parte de esa carrera".
Según Hutchinson, la planta de Gladstone tiene como objetivo producir 2 GW de electrolizadores al año y abastecer a los proyectos que la empresa tiene previstos en Australia, pero también a escala internacional.
"Esto no significa que no vayamos a comprar a otros", afirmó. "Nuestras necesidades van a ser enormes a escala mundial. Por eso mantenemos excelentes relaciones con todos los proveedores del mundo y trataremos con ellos en diferentes situaciones. Pero en cuanto a nuestra propia tecnología, avanza muy bien e iniciaremos la producción este año”.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios