Ya os lo adelantamos hace algunos días y ahora un informe elaborado por Transport & Environment (T&E) en colaboración con Ecodes asegura que los vehículos híbridos enchufables “contaminan más de lo que afirman las marcas” argumentándolo con pruebas realizadas a tres modelos: un BMW Serie 3, un Peugeot 308 y un Renault Mégane E-TECH phev. El desarrollo de los test ha sido encargado a la Universidad Tecnológica de Graz, en Austria y la primera petición que han hecho va dirigida a los gobiernos en cuanto a que dejen de subvencionar vehículos con dicha tecnología y se les aplique un impuesto en función de su contaminación real.

Unas afirmaciones que saltan a la palestra al confirmar que los resultados de CO2 han sido superiores a los que homologan oficialmente. Según el informe “el BMW contaminó hasta el triple de su clasificación oficial en un trayecto interurbano típico, mientras que el 308 y el Mégane, pese a obtener mejores resultados contaminaron un 20% y un 70% más de lo asegurado, respectivamente”.

Para estos test se realizó un trayecto de ida y vuelta “relativamente corto”, de 55 kilómetros en los que el Peugeot consiguió realizar el 53% de la misma en modo 100% eléctrico con una sola carga mientras que el BMW exhibía el 74% y solo el Renault tenía la autonomía eléctrica afirmada. T&E también apunta que el BMW ha introducido una nueva tecnología que cambia automáticamente a conducción 100% eléctrica al circular por las ciudades, sin embargo “encendió el motor dos veces". Esto confirma una tendencia y es que la mayoría de estos vehículos acaban moviéndose únicamente con el motor de combustión cargando “rara vez” sus baterías.

Fin a las ayudas

Con todos estos datos expuestos en el informe, la organización considera que el objetivo final debe ser incentivar la adquisición o el uso de vehículos que verdaderamente no emitan CO2 y pese a que los híbridos enchufables se venden como una solución para reducir las emisiones “las pruebas en condiciones reales demuestran que no es así”, detalla el informe, que continúa asegurando que solo uno consiguió la autonomía eléctrica anunciada en ciudad y los tres emitieron más de lo homologado en trayectos interurbanos", en palabras del responsable de transporte y movilidad de Ecodes, Cristian Quílez.

Ante esta tesitura, desde E&T son claros y los híbridos enchufables “no deberían ser tratados de igual manera frente a los eléctricos puros en lo que a etiquetas se refiere”, pues como bien sabes ambos tienen el sello CERO de la DGT aunque en el caso de los phev solo se les otorga si superan los 40 km de autonomía cero emisiones. Una decisión que preocupa más es la de no incluir a los eléctricos de ocasión en el Plan MOVES III  como sí ocurre actualmente en Francia recalcando así que “hace falta realizar cambios urgentemente y que los híbridos enchufables no deberían tratarse como vehículos sin emisiones” porque en las pruebas por carretera, al agotar sus baterías, los tres modelos analizados emitieron entre 5 y 7 veces más de CO2 por carretera de lo homologado