El gobierno japonés ha aprobado un proyecto de enmienda a la legislación existente para permitir la instalación de energía eólica marina en zonas económicas exclusivas (ZEE), un hito hacia el objetivo del país de neutralidad de carbono para 2050.
Japón aspira a tener 10 gigavatios (GW) de proyectos de energía eólica marina para 2030 y hasta 45 GW para 2040, para reemplazar los combustibles fósiles, incluido el carbón y el gas natural licuado (GNL), en su mix energético, para los cuales la energía eólica marina flotante es esencial.
La nueva legislación permitiría instalar parques eólicos en áreas offshore más allá de las actuales aguas territoriales e internas, dijo el gobierno, en una declaración. "A través de este proyecto de ley, podremos crear proyectos estables y de gran tamaño en el área marítima", dijo el ministro de Industria, Ken Saito, en una sesión informativa, añadiendo que la nueva legislación debería acelerar la expansión de la energía eólica marina.
RWE e Iberdrola
Empresas energéticas globales, como la alemana RWE o la española Iberdrola, han estado instando a Japón a reforzar las subastas y hacer las inversiones más atractivas, en medio de costos crecientes a medida que crece la competencia por los proveedores en todo el mundo, y a promulgar leyes para la ZEE.
Las ZEE son aguas no territoriales donde las naciones marítimas reclaman derechos de exploración minera y pesca.
A diferencia del sistema de subasta para aguas territoriales, el esquema de ZEE propuesto adoptará un proceso de aprobación de dos pasos.
Asimismo, el Ministerio de Industria seleccionará el área de instalación, considerando factores como las condiciones del viento, la profundidad del agua y la proximidad a las aguas territoriales. Inicialmente se proporcionará una aprobación provisional a los solicitantes.
Posteriormente, la aprobación oficial se otorgará tras consultas con las partes pertinentes, incluidos pescadores y transportistas, dijo el gobierno.
Para finales del primer semestre
El gobierno pretende aprobar la legislación enmendada durante esta sesión parlamentaria, cuya conclusión está prevista para finales de junio.
Podrían pasar unos 10 años hasta que el primer caso en la ZEE entre en funcionamiento, dijo a los periodistas Masaki Higurashi, director del Ministerio de Industria, añadiendo que un área de instalación podría soportar una capacidad de generación de varios gigavatios.
Además, Japón tiene actualmente menos de 0,5 GW de energía eólica marina instalada y está desarrollando algunos parques eólicos marinos flotantes, principalmente con fines de demostración.
Los actores de la industria están observando de cerca la legislación sobre la ZEE, que es clave para desbloquear el desarrollo de la energía eólica marina flotante y permitir que forme parte del proceso estatal.
Hasta ahora, las tres rondas principales de subastas estatales japonesas han involucrado turbinas que se fijarán al fondo del océano.
Miguel
14/03/2024