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Hoy en día, los procesos de digitalización de la información permiten disponer de una información de detalle del cliente que, correctamente almacenada en un BigData y dotándolo de la Inteligencia Artificial para mejorar la información en base a la demanda de la misma, y con unos Algoritmos específicos que permiten explotar la información y obtener resultados específicos, ayuda a la toma de decisiones sobre el riesgo o conveniencia de llevar a cabo la contratación y ofrecer mejoras en los precios de los servicios de contratación. Incluso, algunas comercializadoras lo utilizarían para hacer ofertas complejas a los clientes a través de su análisis socioeconómico.

Este nuevo mecanismo de valoración del riesgo del cliente, y de su situación socioeconómica, está cambiando la forma de relación con el cliente dado que permite ofrecer, además de un precio de la energía adecuado a sus características, nuevos servicios como pueden ser proyectos de autoconsumo.

Las claves de esta nueva forma radican en:

  • El acceso a una gran cantidad de fuentes de información disponible, la identificación de las múltiples variables requeridas para el análisis: historial crediticio, portales inmobiliarios, estadísticas, redes sociales, centros estadísticos, multas impagadas, consumos energéticos, etc.,
  • La seguridad de la información que se va a tratar mediante el estricto cumplimiento de la ley de protección de datos.
  • La automatización, mediante el desarrollo de robots que permanentemente estén actualizando la información que proviene de las fuentes de información.
  • El diseño de algoritmos que permitan el análisis de la información y la obtención de resultados.
  • El tiempo de respuesta que debe de ser en segundos dado que la contratación de estos servicios se realizará on-line.

Los consumidores, sean personas jurídicas o físicas, buscan que estos servicios sean de rápida contratación y, además, que el precio del servicio sea el adecuado a sus características: buen pagador, zona donde vive, consumo eléctrico, servicios adicionales. Las comercializadoras debe tener la capacidad de adecuar sus precios a los conceptos anteriormente indicados, y además limitar los riesgos de impago y/o fraude. La futura tendencia de las comercializadoras será ir a precios no generalistas y si ad-hoc, lo que significa aumentar la cercanía y el conocimiento del cliente por parte de la comercializadora.

Quizás el consumidor no entienda esta nueva forma de analizarle y de ofrece precios, pero, los avances de la tecnología y las características de la comercializadora como empresa de financiación a corto obliga a ésta a cualificar al Cliente, el cual con el tiempo lo agradecerá.

En Optimia llevamos diseñando un BigData y desarrollando la Inteligencia Artificial para suministrar información a sectores que requieren el conocimiento del Cliente para ofrecer sus productos.

Tenemos clientes en sectores como: UtilityTech, FinTech, InsurTech, PropTech y, Micro prestamos. Sectores que utilizan la contratación on-line para dar una respuesta rápida al Cliente y poder cerrar el contrato con las garantías requeridas.

Esto ha sido posible dada la gran cantidad de información que manejamos desde hace años debido a nuestra diversidad de servicios.

Algunos de los algoritmos que utilizamos en Optimia son:

Con estos algoritmos somos capaces de hacer un risk scoring bajo un modelo de rating similar a: Estándar & Poor´s en el corto plazo.

La comercializadora a través de los algoritmos de análisis y toma de decisiones tendrá la capacidad, en el momento la firma de un nuevo contrato o de renovación del contrato, de adecuar el precio y los servicios al cliente.

Esto permite a las comercializadoras cambiar su forma de actuación, limitar su riesgo financiero, disminuir sus impagados, y ser más competitivos.

La Inteligencia Artificial y todo lo que la rodea está empezando a ser clave en actividades como:

  • Oferta de servicios de financiación: hipotecas, créditos, tarjetas de pago.
  • Apertura de cuentas bancarias.
  • Alquiler de viviendas, coches, etc.
  • Contratación de servicios de suministro: telefonía, agua, gas, electricidad.
  • Instalación de paneles fotovoltaicos a través de financiación y su pago mediante el consumo de electricidad.

La implantación de un simple sistema de autoconsumo para una instalación residencial se podría hacer a través de una web y de forma instantánea dado que, a través e la IA y de los algoritmos adecuados, se puede conocer:

  • la ubicación,
  • la geolocalización,
  • el tipo de cubierta y su orientación,
  • los metros cuadrados de la vivienda,
  • el CUPS,
  • el consumo medio de los últimos años,
  • la Distribuidora,
  • la tarifa eléctrica,
  • el termino potencia,
  • el dueño de la vivienda,
  • su situación socioeconómica,
  • la situación socioeconómica de la zona donde se sitúa la vivienda.

En Optimia tenemos los servicios para que la comercializadora pueda llevar cabo sus ofertas.

Luis F. Valero es Energy Sector Business Development en Optimia Infortech.

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