La producción mundial de carbón en 2015 disminuyó por primera vez desde la década de 1990 hasta los 7 millones de toneladas, debido a un menor crecimiento económico y a la debilidad de la demanda en las principales economías, según el informe 2016 de EURACOAL, la organización de carbón europea, y su futuro no se presenta nada halagüeño.
La producción mundial de carbón térmico disminuyó ligeramente desde los 6.200 millones de toneladas (Mt) hasta los 6.100 millones de toneladas y la hulla también cayó, desde los 100 millones de toneladas a las 900.
De entre los grandes productores, solo India tuvo un aumento en 2015, el 6,9% respecto al año anterior, hasta los 494 millones de toneladas, aunque no al nivel que había previsto su gobierno para reducir su dependencia del carbón importado, y Rusia, que aumentó a 373 millones de toneladas. Pero China, el principal productor mundial, por primera vez en su historia en 2015 produjo menos carbón (3,68 millones de toneladas), una reducción del 3,5% en comparación con el año anterior.
Otros países han seguido la estela de China. Por ejemplo, Australia disminuyó la producción en un 4,5%, a 421 millones de toneladas en 2015, debido principalmente a los bajos precios, Indonesia redujo drásticamente la producción hasta los 392 millones de toneladas, una reducción del 14% en comparación con la producción de 2014, y en esa misma línea descendente se encuentran Sudáfrica, Colombia y Polonia.
Importaciones de carbón en Europa
Y si la producción está perdiendo fuelle en otros puntos del planeta, las importaciones en Europa están en la misma línea. El estudio se centra en los cinco mayores países importadores de carbón cuyo comportamiento ha sido dispar, porque la reducción de producción nacional no siempre ha sido sustituida por importaciones.
El caso más llamativo ha sido el de Reino Unido, las importaciones de carbón térmico se redujeron drásticamente a 17 millones de toneladas en 2015 (-47%). Algo que no ha ocurrido en otro países como Francia, Alemania, Italia o España. Porque en Francia las importaciones aumentaron a 10 millones de toneladas (+ 11%), como en España, un 14% más, y en Alemania un 2% más, mientras que en Italia se han mantenido estables en 16 millones de toneladas.
Pese a todo, el mercado europeo del carbón ha seguido disminuyendo desde 2012 debido a los bajos precios de la electricidad, la pérdida de cuota de mercado por la irrupción de las energías renovables y la presión de la regulación ambiental.
Pedro Maldonado
26/08/2018