Australia está experimentando una rápida transición energética, impulsada por sólidas políticas gubernamentales, una abundancia de recursos solares y eólicos y ambiciosos objetivos de neutralidad de carbono. Según GlobalData, se prevé que las energías renovables representen el 73,3% de la generación total de electricidad del país para 2035.
Las energías renovables representarán el 73,3% de la generación eléctrica de Australia para 2035
Según previsiones de GlobalData, las renovables también dominarán la matriz de capacidad instalada de Australia, alcanzando el 77,8% para 2035

El último informe de GlobalData, “Australia Power Market Trends and Analysis by Capacity, Generation, Transmission, Distribution, Regulations, Key Players and Forecast to 2035” (Tendencias y análisis del mercado eléctrico australiano por capacidad, generación, transmisión, distribución, regulaciones, actores clave y previsiones hasta 2035), revela que las renovables también dominarán la matriz de capacidad instalada de Australia, alcanzando el 77,8% para 2035. Esto representa un cambio significativo con respecto a 2024, cuando las renovables constituían el 48% de la capacidad instalada y el 31,6% de la generación, mientras que la energía térmica representaba el 44% de la capacidad y el 63,4% de la generación.

Mohammed Ziauddin, analista de energía en GlobalData, dijo: “La transición energética de Australia cuenta con el apoyo de políticas como el Renewable Energy Target (RET), el Capacity Investment Scheme (CIS) y la iniciativa Rewiring the Nation, junto con los objetivos estatales de energía renovable. Estas medidas, junto con la fuerte adopción de la energía solar en techos y el desarrollo a gran escala de proyectos eólicos y solares, están impulsando un crecimiento récord en la adición de capacidad renovable”.
Crecientes desafíos
No obstante, Australia enfrenta crecientes desafíos para alcanzar su objetivo de 82% de electricidad renovable para 2030. Los retrasos en la conexión a la red, los cuellos de botella en los permisos y la resistencia de algunas comunidades a nuevas infraestructuras de transmisión están ralentizando el despliegue de proyectos a gran escala.
La insuficiente capacidad de respaldo y almacenamiento para integrar la creciente generación solar distribuida también ha provocado riesgos de congestión y reducción de producción en varias regiones. Además, las limitaciones en la transmisión y la incertidumbre en la planificación han retrasado el retiro de algunas plantas de carbón, lo que añade presión sobre el objetivo de 2030.
Australia aspira a alcanzar cero emisiones netas para 2050, apoyándose en iniciativas clave como el programa Solar Sunshot, Hydrogen Headstart y el Crédito Fiscal para la Producción de Minerales Críticos, que fomentan la inversión en energía solar fotovoltaica, hidrógeno y almacenamiento en baterías. Los programas Rewiring the Nation y Capacity Investment Scheme siguen siendo esenciales para garantizar que los proyectos renovables puedan conectarse eficientemente y suministrar energía firme y confiable.
La solar arrasa
El informe destaca que la energía solar fotovoltaica seguirá siendo la principal tecnología renovable, respaldada por su alta tasa de adopción, con más de 4,16 millones de sistemas instalados en todos los segmentos para mediados de 2025 y casi 300.000 nuevos sistemas en techos cada año. La energía eólica, tanto terrestre como marina, también está expandiéndose rápidamente, especialmente en las Zonas de Energía Renovable (REZ), que impulsan la inversión regional y la diversificación de la red eléctrica.
“El sector eléctrico australiano está experimentando una profunda transformación, equilibrando el retiro de plantas de carbón con un rápido crecimiento de las energías renovables y la modernización de la red. Aunque el objetivo para 2030 sigue siendo altamente ambicioso, la alineación continua de políticas, la aceleración en la entrega de infraestructura y una mayor inversión en respaldo y transmisión serán cruciales para mantener el impulso de la energía limpia del país hasta 2035 y más allá”, concluye Zia.
No hay comentarios






Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios