El Gobierno portugués decidió suspender este año la retribución por garantía de potencia que abonaba a Energías de Portugal (EDP) y Endesa, un incentivo que pagaba para que las eléctricas estén siempre disponibles para producir. Como una especie del pago por capacidad que tiene el mercado eléctrico español.
En una orden ministerial publicada este lunes en el Diario de la República, el Ejecutivo socialista anuncia que ha aplazado la subasta anual para atribuir estos incentivos prevista para 2018, ante las dudas de Bruselas de que sea compatible con las directrices europeas.
De esta forma, el Gobierno está a la espera de que la Comisión Europea (CE) se pronuncie sobre la compatibilidad de este mecanismo, "con las disposiciones comunitarias relativas a las ayudas de Estado en el sector de la energía".
En el caso de recibir luz verde de la CE a lo largo de 2018, se podrían pagar estos incentivos por los meses que resten del año, según la orden ministerial.
El régimen de garantías de potencia busca asegurar el abastecimiento de los consumidores de energía cuando no es posible hacerlo en las condiciones normales de mercado.
Según un informe divulgado en 2016 por la Entidad Reguladora de los Servicios Energéticos (ERSE), los incentivos pagados a EDP y a Endesa con este régimen supondrían un coste de 665 millones de euros al Estado portugués. Pero en realidad el impacto es para la eléctrica lusa. A la española solo le afecta a su ciclo combinado de Pego y solo percibía 1,5 millones de euros.
Además, ambas compañías ya conocían de antemano que esto iba a suceder. El Gobierno portugués introdujo una disposición en los presupuestos generales del Estado para 2018 que preveía la formalización de esta suspensión de la subasta de 2018 hasta que se obtenga el pronunciamiento de la CE.
La legislación que se ha aprobado este martes, no es más que la formalización de esta disposición del Presupuesto General del Estado, y tiene por tanto carácter neutral para Endesa ya que previsiblemente haya presupuestado el año sin incentivos para la central lusa.
Ambas compañías han defendido en varias ocasiones la necesidad de estas ayudas para garantizar la producción de energía en el país.
Fukushima4ever
04/04/2018