Primera prueba del Audi A3 allstreet: para todos los públicos

Hablar del Audi A3 es hacerlo de un auténtico pionero. Lanzado el mercado en 1996 fue el encargado de popularizar el concepto de compacto Premium en un mercado en el que solamente existía el BMW Serie 3 Compact (E30). Sin embargo, el modelo de Ingoldstat no solo la democratizó, sino que la puso en el panorama automovilístico ofreciendo así la experiencia Premium en el segmento que más demanda comercial proponía por aquel entonces. Desde entonces se han comercializado en todo el mundo nada menos que 6 millones de unidades, que se dice pronto.

Ahora, aprovechando la actualización de mitad de vida comercial de su cuarta generación, la firma de los cuatro aros quiere, de nuevo, romper el mercado con el A3 allstreet que nosotros hemos tenido la oportunidad de conducir de primera mano por las espectaculares carreteras secundarias que conectan Sevilla con El Rocío. Una toma de contacto que, ojo, no se circunscribe exclusivamente a dicha alternativa, sino que también hemos podido conducir el resto de gama, con los Sportback y Sedán como grandes baluartes, sin dejar de lado el S3, en lo que es la gama más completa de un compacto Premium en la actualidad.

Cambios comunes

Antes de entrar de lleno en el A3 allstreet, vamos a repasar qué trae está actualización en la gama A3. Y es que como buena renovación de mitad de ciclo se centran principalmente en el diseño exterior e interior. Si bien por fuera las modificaciones no son del todo exageradas, sí vemos un frontal completamente nuevo en el que destacan las ópticas, los paragolpes y, sobre todo, la parrilla Singleframe que ofrece un inédito tramado incrustando el nuevo logo en la parte superior del mismo.

Nuevo es también el paragolpes posterior, que ofrece una silueta más agresiva y deportiva, así como el difusor que enfatiza dicha sensación en los niveles de acabado S, que ahora pasan a coger inspiración de los Audi RS. A estrenar también tiene los juegos de llantas de aleación y los colores para la carrocería, como el Rojo Progressive o el mate Gris Daytona. Por último, cabe mencionar el trabajo realizado por Audi en la iluminación, aspecto en el que la firma de los cuatro aros es casi pionera, proponiendo hasta cuatro firmas lumínicas diurnas completamente configurables para que cada usuario haga único su estilo.

De puertas para dentro los cambios son igualmente escuetos aunque se percibe un nuevo selector del cambio más pequeño, nuevas salidas de aire o tapicerías a escoger que antes no existían. En lo que a conectividad se refiere, ahora todos los A3 2024 vienen de serie con un monitor central de 10,1 pulgadas en el que se han mejorado los servicios Audi connect. Del mismo modo y como ya hiciera con el A4, se ha aumentado la oferta de elementos a adquirir bajo suscripción durante el tiempo que se quiera, como pueda ser el control de crucero adaptativo, el asistente de luz de carretera o ampliar el sistema de climatización de serie a una climatizador bizona. No hay cambios en este caso en la calidad percibida ni en la habitabilidad.

Motores del Audi A3 2024

En lo relativo a la gama mecánica, el A3 2024 mantendrá su extensa gama de motores que comenzando por los gasolina 1.5 TFSI de 116 y 150 CV así como por los diésel 2.0 TDI con los mismos niveles de potencia, para de ahí dar el salto al S3 con el 2.0 TFSI que ahora incrementa su potencia a los 333 CV y esperar como agua de mayo al RS 3 que seguirá contando con el exquisito 2.5 TFSI de cinco cilindros en línea y del que se espera incremente todavía más su ya descomunal rendimiento.

Una gama mecánica que no hace ascos para nada a la electrificación, todo lo contrario, pues en el caso de combinar el 1.5 TFSI con la transmisión automática de siete relaciones, acopla un sistema eléctrico con batería de 48 voltios que le dota de la etiqueta ECO y rebaja ligeramente el consumo. Podrá escogerse con los dos niveles de potencial existentes aunque la comercialización ha arrancado con el de 150 CV.

Ahora bien, la punta de lanza de esta electrificación seguirán siendo los híbridos enchufables, que si bien llegarán a finales de año, es de recibo pensar que introduzcan las mejoras de los últimos productos del grupo Volkswagen, como el Passat o el Octavia, es decir, que el de mayor potencia incremente su rendimiento a los 272 CV y que la autonomía eléctrica supere los 100 km gracias a la mayor batería.

Audi A3 allstreet: estilo campero

Llegamos ya a la que sin duda es la gran novedad de esta renovación. En resumidas cuentas, el A3 allstreet vendría a ser la carrocería crossover del compacto alemán que llega para satisfacer las necesidades de ese público ávido de aspecto aventurero pero que no quiere o no puede optar por un SUV. Estéticamente salta a la legua su diferenciación con el resto de A3, comenzando por la parrilla Singleframe que hereda el diseño de la familia Q, es decir, la de los SUV. Junto a ella aparecen igualmente paragolpes de corte más robustos, con la zona inferior protegida, pasos de rueda y taloneras laterales con la protección plástica negra, barras sobre el techo y enganche de remolque desmontable. Pero la principal diferencia frente a cualquier otro A3 son los 30 mm extra de altura que saca al resto de sus hermanos, 15 de los cuales vienen determinados por los muelles y la otra mitad por el flanco del neumático, dotándole de un aspecto más SUV.

En este caso, las llantas son de 18 pulgadas de serie y de 19 opcional, mientras que la nota de color la da el tono Verde Distrito que es exclusivo de esta versión. De puertas para dentro, no hay cambios reseñables frente a cualquier otro A3 de la gama, destacando su elevada calidad de construcción con materiales como la piel vuelta en los paneles de las puertas o el salpicadero.

Prueba del Audi A3 allstreet

En lo que a motores se refiere, está disponible con los dos de 150 CV, tanto en diésel (35 TDI) como el gasolina (35 TFSI) pero con el apellido MHEV, es decir, que luce la etiqueta ECO ya que va asociado de serie a la transmisión automática de siete relaciones y al sistema eléctrico de 48 voltios. Una versión más lógica con la que Audi quiere llamar la atención de aquel posible comprador de un Q3 ofreciéndole casi el mismo aspecto campero, con dicho sello medioambiental, un precio más económico y un comportamiento de compacto.

Porque si bien el Q3 no es que peque de ser malo en dinámica, la realidad es que este A3 allstreet nos ha demostrado ser más firme y aplomado, propio de un compacto que siempre ha destacado en este aspecto. No solo destaca por empuje de motor, el cual ya conocíamos de haber probado en el Cupra León eTSI (prueba), sino que el tacto general es más preciso. Además, el haber elevado su suspensión frente a cualquier otro A3 no le perjudica en nada, todo lo contrario, le da más versatilidad a la hora de querer sacarlo de lo ‘negro’. Y en cuanto a la eficiencia, la tecnología híbrida ligera de 48 voltios le otorga ese puntito de ahorro de combustible gracias a la posibilidad de desconectar el motor de combustión en determinados momentos, logrando así que el gasto no supere en ningún caso los 6,5 l/100 km.

¿Y la tracción total? Pues de momento ausente en este A3 allstreet por dos motivos, el primero porque en dicho segmento no se destila mucho un sistema 4x4 que encarezca el precio y reduzca ligeramente las capacidades internas (el maletero sería algo más pequeño de los 380 litros que cubica). El segundo, porque entonces entraría a formar parte de los crossover derivados de turismos, como el A4 o el A6 cuyo apellido es allroad y no allstreet. Pero ojo, porque desde Audi no nos han asegurado al 100% que no vaya a haber un A3 con tracción total, lo único que quizá haya que esperar algo más de la cuenta para ver cómo responde el mercado.

En definitiva

Audi lo ha vuelto a hacer. Ha conseguido que el A3 siga estando en el candelero con una actualización de vida comercial que va más allá de los cuatro cambios de siempre. El compacto Premium, creador de esta categoría por derecho propio, pone en liza esta alternativa de aspecto aventurero que a buen seguro atraerá el interés de muchos usuarios, deseosos de tener un SUV o un crossover con un punto más dinámico. Puede que sea más pequeño y menos capaz internamente que un Q3, pero la realidad es que la firma de los cuatro aros lo ha posicionado tanto económicamente como a nivel de equipamiento en un perfecto equilibrio, ya que de serie parte con más dotación que su hermano SUV al tiempo que añade esa interesantísima etiqueta ECO. Dicho esto el Audi A3 allstreet tiene un precio de partida de 43.080 euros, cifra que corresponde al 35 TFSI MEHV, mientras que el diésel sube a los 45.160 euros, quedando, en ambos casos y a igualdad de motor, X euros por debajo del Q3.

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