El fotógrafo Adrian Kingsley Hugues iba con la intención de sacar una fotografía de la aurora boreal. Las previsiones meteorológicas avisaron de que se vería cerca de la localidad de Anglesey en Gales. El caso es que no hubo aurora boreal pero consiguió darle un aspecto parecido gracias a la iluminación de la central nuclear de Wylfa al norte de Gales.
La imagen es espectacular y la toma tiene mayor mérito al conseguir sacar la estela de una estrella fugaz o la entrada de un pequeño meteorito en la estratosfera. Desde luego que, con toque o sin retoque, la fotografía merece la pena, y eso que la policía estuvo a punto de quitarle la cámara. En Reino Unido controlan todo lo que se acerca a una central nuclear. Las medidas de seguridad siempre son pocas.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios