La red eléctrica de Texas se enfrenta a las crecientes necesidades del sistema

El Consejo de Fiabilidad Eléctrica de Texas, o Ercot, se enfrenta a dos grandes convulsiones en los próximos años. En primer lugar, se prevé que la capacidad renovable de la región aumente un 120% a finales de la década. Y en segundo lugar, la demanda máxima del sistema podría alcanzar los 152 gigavatios en 2030 según las estimaciones de Ercot, casi el doble del máximo probado de la red actual. Las empresas de servicios públicos están incrementando el gasto para hacer frente a estos retos, pero la construcción de la red resultante sigue estando por debajo de lo que se necesita para alcanzar el cero neto.

Ercot se enfrenta a un aumento de la carga y la congestión, lo que significa que el desarrollo de la red y la mejora de la resiliencia son cruciales. La comisión ha previsto que en 2030 podrían conectarse 67 gigavatios (GW) más de demanda, un 78% más que en 2023.

El crecimiento de la demanda se concentra en el oeste, rico en petróleo y eólica, y en el sur, lo que da lugar a tarifas de congestión y restricciones al exportar energía al resto de Texas.

Varias empresas tejanas están intensificando sus actividades. Oncor Electric, ETT Texas, CenterPoint Energy y AEP Texas gastaron más de 8.800 millones de dólares anuales en gastos de capital de media durante 2022-23. Oncor anunció un plan de capex a cinco años de 24.200 millones de dólares y lidera las instalaciones de transformadores planificadas. AEP Texas está mejorando el 16% de los kilómetros de circuitos de transmisión actuales.

Las empresas de servicios públicos tienen previsto gastar 13.600 millones de dólares en el desarrollo de la transmisión en 2024-26, lo que supondrá 4.600 millas de circuito de mejoras y ampliaciones de líneas eléctricas, así como el despliegue de transformadores y nuevos equipos de potencia reactiva.

Para 2030, las mejoras y ampliaciones previstas de las líneas de transmisión siguen siendo un 12% inferiores a lo que se necesita en el Escenario de Transición Económica de BNEF, lo que podría poner en riesgo la capacidad de la red para acomodar la nueva generación y el crecimiento de la demanda. También está muy lejos de una transición a cero emisiones netas.