Para avanzar en la reforma del mercado de la electricidad europeo, la Presidencia del Consejo de la UE tantea la supresión temporal del artículo sobre contratos de precio garantizado.
La Presidencia española explora tres vías para desbloquear las discusiones sobre el artículo relativo a los CfDs (contratos por diferencia, contratos con precio garantizado por el Estado). Una de ellas mantiene los parámetros de la última nota, mientras que una segunda establece un mayor control sobre el volumen de ingresos de los CFD (cuando el precio de mercado es superior al nivel garantizado) cuando se destinan a consumidores industriales. La tercera, tal y como se ha mencionado, propone suprimir temporalmente el artículo 19b, referente a los contratos por diferencia, con el objetivo de seguir avanzando en otros puntos de la reforma y poder llegar a un acuerdo para poder asistir al trílogo con una postura común de los Estados miembros.
Fuentes conocedoras han indicado a este medio que la opción que excluye el artículo "es la posibilidad de obviar ese punto de conflicto, de forma que se pueda avanzar, llegar a la orientación general, que es lo que tiene que conseguir la Presidencia europea, para que pueda seguir el debate".
"La cuestión es si queremos paralizar la reforma, o si lo único que queremos es que a este punto que está en escollo se vuelva más adelante, y que se pueda hacer con la Comisión y con los Estados, y con el Parlamento europeo. Porque con el Parlamento europeo se consiguen los acuerdos" han añadido.
Estas mismas fuentes han explicado también que "el papel de la Presidencia española es conseguir una orientación general entre los Estados. Y cuando hay esa orientación general, se entra en el debate en trílogos con la Comisión y con el Parlamento Europeo. Entonces, es posible que ahí, donde no hay acuerdo, se pueda conseguir acuerdo más adelante en ese proceso de trílogos, teniendo en cuenta de que ha habido ya acuerdo en el Parlamento Europeo".
Diferencias políticas
El objetivo de la reforma del mercado de la electricidad, que fue concebida al calor de la crisis de precios del gas y su efecto contagio en el mercado eléctrico en 2022, es favorecer el despliegue de fuentes de generación renovable y contratos a largo plazo que arrojen precios estables y asequibles.
Las divisiones radican en si esos contratos se aplican a las centrales nucleares ya existentes que extiendan su vida útil o amplíen su capacidad, exigencia del bloque nuclear que lidera Francia pero que rechazan los Estados opuestos a la energía atómica, con Alemania a la cabeza.
Concretamente, el artículo 19b, es el centrado en los CfDs aplicados a las centrales nucleares en funcionamiento, y es el que divide a Berlín y París. Los alemanes y sus aliados temen que estos precios garantizados por el Estado y los ingresos que generan (cuando el precio de mercado es superior al precio garantizado) constituyan una ventaja competitiva demasiado grande para Francia y sus centrales nucleares.
El objetivo es que pueda acordarse la versión final de la reforma con la Eurocámara antes de que acabe el año o en las primeras semanas de 2024, ya que a partir de entonces el centro de poder de la UE entrará en una fase preelectoral de cara a los comicios al Parlamento Europeo de junio de 2024.
Miguel
03/10/2023