El Parlamento de Rumanía aprobó hoy con la única oposición de la derecha nacionalista la esperada "Ley Offshore", que expertos e inversores llevan años reclamando para ofrecer seguridad jurídica y condiciones fiscales ventajosas a las empresas capaces de explotar las reservas de gas del Mar Negro.
Horas antes de la votación, el primer ministro rumano, Nicolae Ciuca, había declarado que confiaba en que la nueva ley permitiría a Rumanía ser "independiente desde el punto de vista energético" en menos de cinco años.
La esperada ley llega en un contexto en el que la mayoría de países de la Unión Europea (UE) busca reducir su dependencia del gas ruso tras la invasión de Ucrania ordenada por el presidente de Rusia, Vladímir Putin.
La ley aprobada este miércoles sustituye a la que adoptó en 2018 el Gobierno socialdemócrata liderado de facto por el hoy condenado por corrupción Liviu Dragnea, cuyas reformas del sistema de justicia y su retórica chovinista fueron duramente criticadas por Bruselas y Washington.
La ley impulsada por Dragnea, que dejará de estar vigente cuando entre en vigor el nuevo texto, gravaba los ingresos por los proyectos de gas 'offshore' con impuestos que las empresas del sector tachaban de abusivas, y restringía el derecho de estas compañías a exportar a otros países gas extraído del Mar Negro.
La empresa energética estadounidense Exxon abandonó en 2020 su participación en un proyecto de extracción de gas en las aguas rumanas del Mar Negro. Tras aprobarse la ley de Dragnea, la empresa austríaca OMV pospuso su decisión final sobre su inversión en el Mar Negro hasta 2023.
Cristian
13/09/2022