Soria se queda 'sin un euro' y tira de Montoro para hacer frente al crédito con el que devuelve el bono social a las eléctricas

Al Ministerio de Industria no le salen las cuentas. El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha tenido que pedir a su homólogo de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, dinero para poder hacer frente al crédito con el que está devolviendo a las compañías eléctricas la parte correspondiente a la financiación del denominado bono social eléctrico.

Y claro, para eso está el Fondo de Contingencia que maneja Hacienda para cubrir las necesidades extraordinarias. El caso es que el Consejo de Ministros de este viernes ha aprobado destinar "982.311,47 euros para financiar un crédito extraordinario en el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, para cumplir un Auto del Tribunal Supremo de 2014, que extiende los efectos de otra sentencia del mismo Tribunal de 2012, a favor de Endesa Generación, S.A. y Endesa Energía XXI, S.L.U., relativa a la Orden de 2009 por la que se revisan los peajes de acceso a partir del 1 de julio de 2009 y las tarifas y primas de determinadas instalaciones de régimen especial".

El Auto del Tribunal Supremo ratificó una sentencia de la Sala Tercera del mismo tribunal de 2012 en la que daba la razón a las empresas eléctricas al asegurar que la imposición de la financiación a las cinco grandes compañías del bono social eléctrico era discriminatorio. El Gobierno intentó el año pasado paralizar la sentencia de 2012, pero tras el auto no tuvo más remedio que acatar la decisión del TS e indemnizar a las compañías.

Tal y como contó este diario, el Gobierno decidió no insistir en más recursos y aprobó devolver a las grandes eléctricas 275 millones por este concepto. Las indemnizaciones se repartieron de esta manera: Endesa tenía que sufragar el 41,61%, por lo que ha recibido 113 millones de euros, Iberdrola, el 38% por lo que percibió 105 millones y el resto se lo repartieron Gas Natural que le tocaba el 14,18% y  EDP y E.ON (ahora Viesgo),  el 2,64% y el 2,36%, respectivamente.

Industria tuvo que pedir financiación para hacer frente al pago de los 240 millones que costó el bono social a las eléctricas en 2014. Y ahora, se ha quedado sin dinero para hacer frente al crédito y ha tenido que pedir casi un millón de euros para pagarlo. Una chapuza en toda regla, al no hacer bien las cuentas a la hora de presupuestarlo.

Dinero que al fin y al cabo pagamos todos los españoles tras una decisión del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero que en julio de 2009 aprobó la creación del bono social, financiado únicamente por las cinco grandes eléctricas.

Ante la sentencia del Supremo, el Gobierno actual tuvo que tomar cartas en el asunto y cambiar quiénes iban a financiar el bono social. Amplió el número de afectados, es decir, de compañías que financian el bono social. El nuevo esquema carga la financiación sobre un total de 27 empresas, que son las verticalmente integradas, si bien las cinco grandes eléctricas de Unesa, y especialmente Endesa, Iberdrola y Gas Natural Fenosa, deben asumir el 99% de este coste, que ronda los 200 millones de euros.

Pues bien, a los pocos días de aprobarse esta medida, las cinco grandes eléctricas recurrieron el real decreto y el Supremo se lo admitió a trámite. El caso sigue su curso y se tendrá que ver si, de nuevo, el Supremo le da la razón a las compañías o al Gobierno, que cree que la medida ya no es discriminatoria al ampliar el número de afectados, aunque no así la cifra a financiar por cada una de las cinco grandes eléctricas.