Suiza estudia limitar el uso del coche eléctrico

Que Europa será un continente eléctrico en lo que a movilidad se refiere no es algo que digamos nosotros sino que los ejecutivos pertinentes ya se han encargado de confirmarlo con la prohibición de la venta de coches de combustión a partir de 2035. Un manifiesto en el que la mayoría de estados parecen estar de acuerdo pero la situación político-económica actual provocada por la guerra de Ucrania parece que empieza a cobrarse sus primeros detractores por culpa de los altos precios de la energía y las posibles restricciones que ello conllevaría.

Una problemática que, como ya te dijimos, afectaría incluso a la construcción de nuevas plantas de baterías como las que tiene proyectadas Volkswagen e incluso en Francia existe un plan para limitar el horario de carga de los vehículos cero emisiones. Pues bien, ahora ha sido Suiza la que ha puesto la voz de alarma. El país helvético está considerando limitar el uso de los coches eléctricos si la electricidad empieza a escasear. El mundo al revés.

Si bien los gobernantes del país centroeuropeo todavía estaría estudiando cuáles serían los pasos a llevar en caso de que surgiera una emergencia energética entre ellos estaría lógicamente el limitar el uso del coche eléctrico “para viajes absolutamente necesarios como pueda ser la práctica profesional, compras, visitas al médico, asistencia a eventos religiosos, citas judiciales (¿te suenan de algo estas restricciones de movilidad? Son muy parecidas a las que sufrimos durante la pandemia).

Junto a esta, el borrador que están barajando las autoridades y que recoge Der Spiegel maneja otras medidas de recorte como puedan ser limitar a 40º C la temperatura del agua de las lavadoras o prohibir directamente artilugios como los sopladores de hojas, los calefactores de patio, los calefactores de asientos en los telesillas y otros lujos. E incluso en lo concerniente a los medios de comunicación se **prohibiría transmitir contenidos en alta definición para no consumir tantos recursos.  **La mayor parte de la energía de Suiza proviene de la energía hidroeléctrica, pero también importa electricidad de Francia y Alemania . La nación alpina está lejos de ser el único país europeo que busca formas de reducir el uso de energía, en este momento.