La investigadora cordobesa Helena Téllez se ha convertido en la primera española en recibir en Japón el Shiseido Female Researcher Science Grant, un premio para mujeres científicas entregado y dotado con un millón de yenes (unos 9.000 euros) por su trabajo sobre cómo generar una energía más limpia.
Téllez, de 36 años, trabaja como profesora asistente en el Instituto Internacional para la investigación de energía baja en carbono de la Universidad japonesa de Kyushu (sur), adonde llegó en 2013 gracias a una beca y después de que su vocación investigadora le hiciese peregrinar al Reino Unido y Alemania.
La joven, cuyo trabajo ya fue galardonado por una sociedad científica japonesa en 2014, investiga en el país asiático sobre la utilización de nuevos materiales en las pilas de combustible.
"Se trata de generar energía eléctrica más limpia y baja en emisiones de carbono", explicó a Efe.
Esta cordobesa trabaja en un laboratorio de la ciudad nipona de Fukuoka para convertir los coches y casas del futuro en elementos menos contaminantes para el planeta y cuenta que su trabajo, lejos de ser "rutinario", es un "reto" para lograr una sociedad energéticamente sostenible.
Originaria de la ciudad de Montilla, extraña los rostros conocidos, el salmorejo y los caracoles: "Aunque en principio yo elegí salir fuera voluntariamente, ahora empiezo a sentirme exiliada porque sé que no hay muchas posibilidades de volver", cuenta tras la ceremonia que la ha reconocido como una de las diez científicas más prometedoras de Japón, un galardón con nueve años de historia.
"Creo que Japón se encuentra entre las cinco primeras potencias del mundo a nivel de investigación. Les falta algo de 'marketing' a la hora de vender sus logros científicos fuera y también tienen la barrera del lenguaje, que les perjudica frente a los anglosajones", opina sobre el país que le ha premiado, por ahora, en dos ocasiones.
Tellez alaba la financiación "a años luz" respecto a Europa que las autoridades japonesas destinan a los proyectos de investigación y destaca la colaboración entre el sector público y el industrial nipón, lo que le ha permitido explorar técnicas punteras en su sector.
"Trabajo con un equipo del que apenas existen una decena de modelos en todo el mundo", detalló.
Pese a que describe su estancia en el país asiático como "muy productiva" y destaca la amabilidad de los japoneses, la científica ha intentado sin éxito volver a España, donde a su juicio las opciones son limitadas y existe "un tapón" que impide a los jóvenes investigadores españoles instalarse en su país de origen.
"En mi grupo de amigos del London Imperial College el idioma en el que hablábamos era el castellano. Casi todos éramos españoles. Es una pena, hay mucho talento fuera de España", se lamentó Tellez, a quien le gustaría llevarse lo aprendido en el extranjero "a casa".
La científica, que invertirá este premio en adquirir "reactivos químicos e instrumentos" para continuar su investigación, cree que la fuga de talento español se puede detener.
"Si los políticos se deciden a invertir en el sector y hay ganas, habrá solución", concluye convencida.
emho
08/07/2016