A estas alturas de la vida en la que los coches eléctricos parece que ya se han integrado por completo no solo en nuestros pensamientos sino también en nuestro día a día (así lo demuestran las ventas mes a mes), parece que hay algunas cuestiones que la mayoría de usuarios comienzan a comprender. En este caso nos vamos a centrar en la época del año en la que acabamos de entrar, el invierno, donde la temperatura ambiente tiene suerte de superar, en el mejor de los casos los 15ºC. Un valor que cierto es ya querrían tener otros países donde se mueven prácticamente siempre en el ámbito de los 0 a los 5ºC.
Con estas temperaturas, la mayoría de usuarios que tiene un vehículo eléctrico sabe, o al menos debería saberlo, que uno de los grandes perjudicados es la batería y, por ende, la autonomía que conseguirá finalmente. Con el frío el recorrido de un coche cero emisiones se ve reducido de manera considerable. Esto ocurre por varios factores aunque el principal es que los motores eléctricos tienen que generar su propio calor mientras que los de combustión, dentro de su ineficiencia, generan calor residual redirigiéndolo para calentar la cabina. A ello se suma el hecho de que los diferentes elementos químicos que hay en las baterías necesitan más tiempo para alcanzar el rango óptimo de temperatura (entre 20 y 40ºC).
Hasta un tercio menos
En este sentido, la pregunta que se hace todo el mundo era verdaderamente difícil de cuantificar ya que cada modelo tiene sus propias características. No obstante, gracias al último informe elaborado por Recurrent, una consultora web especializada en la venta de coches eléctricos, sabemos decir de manera más clara y concisa cuánta autonomía pierden los eléctricos.
Para dicho estudio han comparado los 13 modelos 100% eléctricos más populares de Estados Unidos analizando un total de 7.000 coches diferentes para averiguar cuánta autonomía perdían. Pues bien, los resultados obtenidos dicen que en algunos casos pueden llegar a perder un 32%, es decir, un tercio de la misma. Este ha sido el caso del Chevrolet Bolt el único modelo que no se comercializa en España (el resto de la muestra sí) siendo el Ford Mustang Mach-E el segundo que más rango perdía en esta época siendo la versión Premium de 99 kWh la que expusieron a estudio. Para que lo pongas en contexto, en este último caso de los 550 km que homologa el todocamino americano, en inverno te quedarías sin poder recorrer 165 kilómetros dejando así el tope en 385 km.
En el otro lado de la balanza destaca, en cambio, la alta eficiencia del Jaguar I-PACE pues solo perdió el 3% de rango, seguido del Audi e-tron (prueba) que recientemente ha sido rebautizado como Q8 e-tron. Para obtener estos porcentajes Recurrent ha distinguito entre las autonomías máximas y mínimas en uso real que se puede llegar a lograr en verano e invierno, respectivamente. En el caso de la temporada de invierno, la consultora ha tenido en cuenta las cifras que se logran cuando la temperatura desciende hasta entre -6 y -1º, mientras que para la máxima ha tenido en cuenta las cifras hasta una temperatura de 21º aunque en los casos del Mustang Mach-E, Nissan Leaf, los dos Tesla y el VW ID.4 (prueba) se han verificado en conducción real y no solo a partir de la telemática del coche. También es justo comentar que algunos de los modelos analizados cuentan con la ventaja de equipar bombas de calor no siendo necesario realizar un esfuerzo extra por parte de la batería para calentar el habitáculo.
Miguel
29/12/2022