Ningún comentario La Comisión Europea aprobó este lunes el plan de Alemania para inyectar 225,6 millones de euros en la antigua filial de Gazprom en el país, cuya nacionalización está en curso como consecuencia de la guerra de Rusia en Ucrania, según informó la institución en un comunicado.
La empresa - ahora denominada Securing Energy for Europe o SEFE - es "sistémica" porque representa el 14 % del mercado de suministro de gas en Alemania, está activa también en otros Estados miembros, posee y opera el 28 % de la capacidad de almacenamiento y tiene varios gasoductos bajo su propiedad, explica el Ejecutivo comunitario.
La filial de Gazprom
SEFE es administrada por el Estado alemán desde el pasado 4 de abril a través de un fideicomiso, después de que el inicio de la guerra contra Ucrania y la posterior detención del suministro de gas por parte de Gazprom provocase "pérdidas serias" en la por entonces filial alemana del gigante energético ruso.
El control actual finalizaría el 15 de diciembre, pero Berlín tiene la intención de asumir toda la propiedad de la compañía para garantizar "la continuidad de las operaciones comerciales con otros actores del mercado y así seguir sirviendo a los consumidores".
En virtud de la medida propuesta, el capital actual se reducirá a cero para poner fin a la propiedad rusa de SEFE, que posteriormente emitirá acciones ordinarias por la misma cantidad (225,6 millones). Las nuevas acciones serán suscritas por Alemania, que poseerá el 100 % de la empresa.
La nacionalización de Alemania
Este esquema para hacer efectiva la nacionalización de la filial alemana de Gazprom se apoya en el marco temporal de ayudas de Estado que la UE aprobó en marzo y acaba de prolongar y ampliar. Dicho marco permite conceder ayudas públicas a empresas con problemas de solvencia gravemente afectadas por el impacto de la guerra.
En su análisis, los servicios de Competencia de la Comisión Europea concluyeron que la medida es "necesaria, adecuada y proporcionada" para resolver una posible "turbulencia grave" en la economía alemana.
Sin embargo, esta decisión está sujeta al cumplimiento de una serie de condiciones que limitan posibles distorsiones en la competencia, principalmente una prohibición de adquisición y otra prohibición de reparto de bonus.
Además, Berlín se ha comprometido a notificar al Ejecutivo comunitario un análisis de la viabilidad a largo plazo de SEFE y sus filiales que cubra la medida avalada este lunes y, si fuera necesario, cualquier posible medida de recapitalización.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios