Ya sabemos que uno de los principales inconvenientes de los coches eléctricos está relacionado tanto con la autonomía como con los problemas para encontrar un punto de carga. La ventaja es que tanto en uno como en otro lado, la situación ha mejorado considerablemente en comparación con los primeros años y modelos cero emisiones. Ahora no solo es común encontrar coches con más de 400 km de autonomía reales, así como disponer de una infraestructura de carga mínimamente decente para recargar las baterías.
Pese a todo, según el último estudio realizado por IdealPower a petición de Quantum Research Group LLC, el 16% de los conductores a los que han preguntado (para una muestra de 305) se ha quedado en algún momento de su vida sin batería y de ese porcentaje, los más afectados han sido los propietarios de un Tesla, algo que era fácil que ocurriera ya que más de la mitad de los encuestados era dueño de uno de los modelos californianos. Ahora bien, a quien le pasa parece que aprende ya que solo el 4% ha repetido experiencia. Lo que sí es evidente es que para el 44% de los preguntados, la ansiedad por la autonomía ha afectado negativamente en la satisfacción general que tiene en relación a la propiedad de su coche eléctrico.
La mayoría repetiría
Junto a estas preocupaciones hay una que los propietarios de eléctricos detestan, al menos así lo ha expresado el 75% de los encuestados: llegar a un punto de carga y que todas las tomas estén ocupadas. De hecho para un 10% la espera ha sido de más de una hora, aunque según el informe esto no suele ser habitual ya que el tiempo medio de espera está en torno a 15 minutos. Tanto es así que el 70% de los propietarios suele cargar el coche en casa, como es obvio por otra parte, y solo el 16% depende de las estaciones de carga públicas, mientras que el 14% restante realiza una combinación de ambas.
Ahora bien, lo que sí sorprende es que casi la mitad de los preguntados se muestran favorables a pagar un poco más para reservar un punto de carga. De hecho no tendrían inconveniente en pagar unos 12 euros (15 dólares) por dicha acción, circunstancia que como decimos sorprende ya que encarecería una de las principales ventajas de los eléctricos: el coste de la carga. Pese a estos estados de ansiedad, la pregunta clave de este estudio es ¿se arrepiente de haber cambiado de coche? Pues bien, ante lo que muchos puedan pensar, la respuesta es claramente positiva, tanto que el 91% de los que han sido preguntados han confirmado que su próximo coche volverá a ser eléctrico, independientemente de si son propietarios de Tesla (que asciende al 95%) como de otros fabricantes (confirmándolo un 86%).
galan
14/05/2024