Concluye la segunda audiencia de la metodología para retribuir la distribución eléctrica

El plazo de la segunda audiencia pública abierta por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre la nueva metodología para calcular la retribución de la actividad de distribución eléctrica en el periodo 2026-2031 concluye este miércoles.

El texto, que la CNMC sometió a audiencia pública la semana pasada, sustituye a otro anterior que el supervisor publicó en julio y que fue criticado por el sector eléctrico al considerar que era un modelo "disruptivo" frente a la continuidad que se necesitaba.

Aelec, la asociación que agrupa a empresas como Endesa, Iberdrola y EDP, señaló, tras conocer la primera propuesta, que ese modelo tenía "serias limitaciones" tanto en la señal de la inversión, como en la cobertura de costes reales del sistema, por lo que presentaron alegaciones.

En octubre, el Ministerio para la Transición Ecológica presentó su propuesta de planificación eléctrica con horizonte 2030, que prevé una inversión de unos 13.500 millones de euros hasta el final de la década y que incluía un incremento de los límites de la inversión.

Desafíos de descarbonización

Tras abrir esa segunda audiencia, la CNMC apuntó en un comunicado que esta nueva propuesta "representa una evolución hacia un modelo más eficiente y adaptado a los desafíos de la descarbonización y digitalización del sistema eléctrico".

Asimismo, apuntaba que el nuevo texto introducía algunas modificaciones derivadas de las observaciones recibidas durante la tramitación de la circular con el objetivo de continuar reforzando los principios de predictibilidad y estabilidad que precisa el nuevo contexto de electrificación de la demanda.

Un informe de la consultora PwC sobre esta segunda audiencia apunta que persisten algunos aspectos críticos que deben ser reconsiderados como que el modelo debe alinearse con la planificación estatal o que el parámetro de sostenibilidad debe "tener un valor suficiente que incentive las inversiones".

De esta forma, señala que, para atender a la demanda industrial existente y cumplir con los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), es necesario realizar inversiones en redes eléctricas por un importe de 53.000 millones de euros, lo que supone multiplicar por tres el ritmo inversor del período 2021-2025.

Por eso, considera que una pieza clave, además de la planificación realizada por el ministerio, es la "necesidad de disponer de un marco retributivo para las redes eléctricas estable, predecible y atractivo, con una tasa financiera razonable y alineada con el contexto y el nivel de riesgo de la actividad".