Un grupo de activistas contra el cambio climático han ocupado este domingo una mina de lignito en la región minera de Renania, según ha informado la Policía de Aquisgrán, que ha intervenido para poner fin a la acción. Varios activistas han sido detenidos.
Una portavoz de la Policía ha explicado que uno de los activistas bajó voluntariamente de la excavadora, pero otros dos tuvieron que ser desalojados por la fuerza. Ambas partes se han reprochado el empleo de la violencia.
Un millar de personas se han concentrado en el lugar, la mina Garzweiler, en apoyo a la protesta y para exigir el cierre de las minas de carbón, un material usado en las centrales térmicas para la obtención de electricidad a pesar de ser muy contaminante.
Más de 20 organizaciones ambientales, entre ellas Greenpeace y Fridays for Future, han respaldado a la protesta, que comenzó en dos sitios distintos y se unió en un pueblo cercano a la mina a cielo abierto.
El grupo de activistas medioambientales Extinction Rebellion (XR) ha informado que algunos de sus miembros se han salpicado con sangre falsa para simbolizar las muertes causadas por la crisis climática y las consecuencias de la extracción de lignito.
"Cada día mueren miles de personas porque empresas (de energía) como RWE queman lignito, lo que tiene consecuencias climáticas a largo plazo y en todo el mundo", ha indicado el portavoz de XR Lukas Schnermann.
Según XR, el personal de seguridad de la mina, propiedad del grupo alemán RWE, ha actuado "violentamente" con los manifestantes. Un cámara ha sido arrastrado de la ropa y otro periodista cayó al suelo tras un empujón, le quitaron el carné de prensa y destrozaron su cámara.
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