Europa puede evitar 200.000 millones de euros en costes sanitarios cada año y reducir significativamente las muertes prematuras si la UE termina adoptando una ambiciosa política de cambio climático para 2050, según la estrategia a largo plazo de la Comisión Europea.
El logro de las emisiones netas cero de gases de efecto invernadero para 2050 "reducirá las muertes prematuras causadas por partículas finas en más del 40% y el daño a la salud en alrededor de 200.000 millones de euros al año", según la estrategia climática de la Comisión, de la que informa el portal Euractiv.
En la página diez de su comunicación de 25 páginas, el ejecutivo de la UE insiste en que una combinación de energía descarbonizada, descentralizada y digitalizada, baterías más eficientes y sostenibles, motores eléctricos altamente eficientes, conectividad y conducción autónoma también pueden llevar a grandes beneficios de salud para los ciudadanos y la economía europea.
La contaminación del aire es la raíz de los graves problemas de salud y casi medio millón de muertes prematuras son causadas anualmente por las principales fuentes de contaminación y gases de efecto invernadero, como los combustibles fósiles, los procesos industriales, la agricultura y los residuos.
El cambio climático ya es visto como un nuevo desafío para la salud y la necesidad de aumentar la capacidad para responder a él es uno de los tres objetivos estratégicos de la política de salud de la UE, cuya base legal se basa en el Artículo 168 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea. Unión.
En la Asamblea General de la ONU en Nueva York, el pasado mes de septiembre, el Comisario de Salud de la UE, Vytenis Andriukaitis, dijo que una mejor protección contra las enfermedades no transmisibles requiere "un enfoque de salud integral" y un enfoque en los determinantes ambientales de la salud, como la contaminación del aire y el cambio climático".
Otros estudios
Los vínculos entre la salud y el cambio climático se destacaron por primera vez en la revisión de Stern, un estudio pionero realizado por Nicholas Stern de LSE para el gobierno del Reino Unido en 2006, en el que se decía que la lucha contra el cambio climático tendría importantes beneficios para la salud, además de una mayor seguridad energética.
El informe final del Proyecto ClimateCost, un estudio financiado por la Unión Europea publicado en 2011, dijo que "había una gran cantidad de posibles impactos en la salud que podrían surgir del cambio climático, directa o indirectamente". El estudio también destacó un riesgo para la infraestructura de salud y otras infraestructuras críticas como el suministro de agua y energía de eventos climáticos extremos. El costo de adaptar la infraestructura de salud podría ser alto, según el informe de 2011.
En el escenario base de no mitigación, el estudio de 2011 estimó 90.000 muertes adicionales relacionadas con el calor proyectadas cada año para 2050 con un costo de bienestar estimado de 30.000 millones de euros al año.
El informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente (EEA) de 2017 sobre la contaminación del aire señaló que ya causa más de 400.000 muertes prematuras en la UE.
Y en otro informe reciente que evalúa la implementación del Séptimo Programa de Acción Ambiental que establece objetivos vinculantes para la UE para 2020, la Comisión ENVI del Parlamento también expresó su preocupación por la falta de implementación de la legislación sobre calidad del aire en las zonas urbanas. Esa fue una reacción a la revelación de que la contaminación del aire sigue siendo la principal causa de muerte en el medio ambiente en la UE.
Deja tu comentario
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Todos los campos son obligatorios