Gesternova apoya la iniciativa de WWF**_ _**La Hora del Planeta, que se ha convertido ya en uno de los mayores movimientos a nivel mundial en defensa del medio ambiente. Para la comercializadora este año es especialmente importante en la lucha contra el cambio climático puesto que el próximo mes de diciembre, en París, los gobiernos de todo el mundo tienen el reto de aprobar un acuerdo a favor del clima. "El gesto simbólico de apagar la luz durante una hora debe ser en esta ocasión una llamada de atención, casi un grito, de los ciudadanos a los responsables de todo los gobiernos que se reunirán en la capital francesa este otoño", dice Gesternova en un comunicado.
Este 28 de marzo, entre las 20:30 y las 21:30 horas se apagarán las luces de los monumentos más emblemáticos de todo el mundo, pero esto es sólo un gesto simbólico con el que se trata de concienciar de la gravedad del cambio climático, de la necesidad de hacer un uso eficiente de la energía y de apoyar la energía limpia con objeto de reducir el nivel de emisiones de CO~2~ al planeta.
Como recuerda WWF "2015 es un año crucial para el clima ya que en diciembre gobiernos de todo el mundo se reunirán en Paris y deben llegar a un nuevo acuerdo que permita controlar el cambio climático y así evitar los peores impactos ecológicos, económicos y sociales. Las emisiones siguen aumentando y, de seguir a este ritmo, estaremos abocados a un Cambio Climático de consecuencias catastróficas para todos".
Para la organización ecologista, opinión que comparte Gesternova, "es necesaria y urgente la transición del modelo energético actual abandonando los combustibles fósiles como el carbón, el petróleo y el gas, y apostar claramente por utilizar la energía de forma más eficiente y producirla con energías renovables. La tecnología está disponible y lo que se necesita es la voluntad política para impulsar las inversiones en estas tecnologías y abandonar las subvenciones a los combustibles fósiles".
La primera Hora del Planeta tuvo lugar en Sidney en 2007 y al año siguiente San Francisco se sumó a la iniciativa. Ya en 2009 el acontecimiento se convirtió en un evento planetario y se celebra desde entonces el último sábado del mes de marzo.El pasado año más de 7.000 ciudades de 150 países apagaron las luces de sus monumentos y edificios más importantes del mundo como el Empire State de Nueva York, la Muralla China, el Big Ben británico, la Torre Eiffel de París… y si hacemos un recorrido por España veremos que algunos de los simbólicos monumentos que se quedaron sin luz fueron: la Sagrada Familia de Barcelona, el Palacio Real de Madrid o la Alhambra de Granada.
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