Petroecuador mantiene la meta de cerrar el año con una producción diaria de 400.000 barriles de petróleo, siempre que no gane la consulta nacional para cesar la explotación del Bloque 43-ITT, uno de los yacimientos más importantes ubicado en la selva amazónica del Parque Nacional Yasuní.
Durante una reciente visita al Bloque 43-ITT, el gerente de Exploración y Producción de Petroecuador, Francisco Paz, se mostró confiado en lograr esa meta con impulso en los campos más productivos que maneja la empresa pública.
La producción de la petrolera estatal alcanzó el martes los 389.000 barriles diarios de petróleo, en una tendencia creciente después de padecer durante la primera mitad del año dos contingencias que hicieron decaer momentáneamente las cifras.
Las estimaciones de Petroecuador
Entre esos imprevistos estuvieron las protestas de comunidades indígenas de los Bloques 16 y 67, donde Petroecuador denunció actos vandálicos como robo de equipos y cables que de momento impiden que esos campos funcionen al 100 % y estén produciendo 10.000 de los 14.000 barriles posibles por día.
A ello se sumó la paralización de cerca de una semana de los oleoductos que transportan el crudo extraído de la Amazonía ecuatoriana hasta la costa del océano Pacífico, debido a un desprendimiento de tierra en torno el río Marker.
Para alcanzar esa meta de 400.000 barriles diarios, uno de los campos clave es Ishpingo, en la parte sur del Bloque 43-ITT, de donde Petroecuador espera sacar 3.000 barriles adicionales por día de aquí a final de año.
El martes la producción del Bloque 43-ITT fue de 58.000 barriles, en una tendencia al alza sobre su promedio de extracción, que ronda los 55.000, procedentes de 225 pozos situados en once plataformas, bajo la técnica de perforación en racimo que reduce en gran medida la superficie utilizada.
La consulta nacional sobre el ITT se votará el domingo 20 de agosto, en coincidencia con las elecciones generales extraordinarias convocadas tras la "muerte cruzada" declarada por el presidente Guillermo Lasso, con la que disolvió la Asamblea Nacional (Parlamento) cuando abordaba su posible destitución en un juicio político.
El gerente general de Petroecuador, Ramón Correa, recordó a EFE que el perjuicio para el Estado en caso de ganar el "Sí" en la consulta sería de 1.200 millones de dólares al año, en concepto de beneficios por la venta de crudo.
Correa señaló que el Bloque 43-ITT tiene reservas y recursos para extraer crudo de manera segura durante al menos 20 años, lo que según los cálculos de Petroecuador darían al Estado beneficios por 13.800 millones en las próximas dos décadas.
Asimismo, el primer ejecutivo de la petrolera estatal cifró en unos 500 millones el coste de desmantelar el Bloque 43-ITT, un trabajo que ve inviable hacer en un año como dictó la Corte Constitucional en el fallo que dio luz verde a la celebración de la consulta.
A ello sumó unos 250 millones de dólares en indemnizaciones por eventuales arbitrajes internacionales y en compromisos de compensaciones ya adquiridos con las comunidades indígenas que habitan en el área de influencia de la explotación.
El plebiscito fue promovido por el colectivo ecologista Yasunidos, que logró el objetivo de realizar la consulta tras reunir más de 757.000 firmas y llevar una batalla legal de diez años con las instituciones estatales encargadas de su organización, y con ello buscan proteger una de las zonas con mayor biodiversidad del mundo.
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